Julio Alberto Amores (Electro Hiper Europa) todavía se está pellizcando. El noveldense se proclamó el domingo en Murcia campeón de España de la categoría Élite y tuvo la oportunidad de compartir podio con “el gran Alejandro Valverde”, que fue profeta en su tierra y consiguió el título en la categoría profesional. “No todos los días se tiene la oportunidad de codearse con ciclistas de su nivel, con un campeón del mundo, hacer un noveno puesto y ser el primer élite dentro de un pelotón de gran nivel. Todo ello compensa los muchos esfuerzos realizados en los últimos tiempos. La recompensa fue tremenda”. El ciclista alicantino fue noveno en la carrera y primer élite. Estuvo acompañado en el podio por Jesús Alfonso Arozamena (Super Froiz) y Jorge Martín Montenegro (Aluminios Cortizo).

Amores saboreó con sus más allegados el domingo el título y el lunes ha salido a dar un poco a los pedales con su grupeta habitual, que se denominan Terreviento, “a echar unas risas”. Un grupo de amigos que ha sido fundamental para volver otra vez a disfrutar del ciclismo. “La temporada pasada estuve muy cerca de abandonar ya que apenas tuve protagonismo en el Vitus Pro Cycling. Tanto mi novia, que sabe lo que he sufrido, como mi entrenador Alfonso Beltrán, Moreno, Julio Rueda y todos mis amigos me empujaron a seguir insistiendo y no me dejaron que metiera la bicicleta en el armario. Empecé a entrenar y poco a poco fui recobrando las ganas. Todos ellos fueron fundamentales y el domingo en el podio me acordé de sus ganas porque yo siguiera. Les debía una alegría como esta”.

Tras ser segundo en Cocentaina en el Nacional de 2016, con el Controlpark, dio el salto al profesionalismo en el Inteja, con el que ganó la primera etapa del Tour de Guadeloupe. Al año siguiente pasó al Virtus Pro Cycling. “Me gustaría tener una nueva oportunidad. Con los ingleses, el pasado año, tenía un buen calendario, pero las carreras eran en circuitos y estaba fuera de casa. No me salían bien las cosas, como yo quería, y la verdad es que me vine abajo psicológicamente. Resultó muy duro”, recuerda.

Ahora, vuelve a estar en la rampa de los elegidos y con muchas ganas de volver a lo más alto. “Intento hacer las cosas lo mejor posible, pero no depende de mí el volver a competir con el pelotón profesional. Son los equipos los que eligen. Estoy obligado a realizar méritos. Llegaba a Murcia con el triunfo autonómico y las victorias en la Clásica Isaac Gálvez y el Trofeu Joan Escola, además de los esprints especiales de la Vuelta a Salamanca. Entre los diez primeros estoy en casi todas las carreras. El Nacional es un paso más, pero hay que seguir. Tengo muchos retos por delante, aunque va a ser bonito lucir el maillot de campeón de España. El equipo me tiene que hacer uno nuevo, después de que me dieron del Autonómico”.

El corredor del Electro Hiper Europa, con el que regresó a la categoría élite, sabía que en Murcia no podía fallar ya que el Nacional podría ser un bonito escaparate en el que los equipos pueden mirarle de nuevo. “Hace tres años, con Cocentaina, me quedé con la miel en los labios y en los últimos kilómetros, de cara a meta, tenía claro que no se me podía escapar. Me acordé de que Montenegro me robó la cartera en aquella ocasión y que debía estar con los mil sentidos para que no se repitiera. Sabía que el recorrido me favorecía, estaba bien de forma y estuve muy atento durante toda la carrera. Siempre me encontré adelante y en la penúltima subida lo probé, pero era un suicidio. Al irme solo preferí esperar y guardar fuerzas para la última. Me faltó un poco para entrar en el grupo de delante, cazamos desde atrás y en el esprint tuve la suerte de ser el primer élite”.

Reflexiona y afirma que “estar aquí con los mejores, con el nivel que hay, y entrar en un grupo reducido te da mucha moral para seguir trabajando. Mi objetivo es volver a competir en profesionales y tengo que seguir trabajando duro para conseguirlo. Ese es mi sueño. Ganar el campeonato de España es un paso más, pero queda mucha campaña por delante y hay que seguir haciendo méritos”, insiste una y mil veces.

Del 5 al 7 de julio, casi sin tiempo para saborerar su título de campeón de España, "corro en Francia en el Tour de Dupyemon”. Luego estará en la Vuelta a Zamora, antes de tomarse unos días descanso. A continuación, “afrontaré la segunda parte de la temporada con nuevos bríos y deseos de seguir aumentando el palmarés”.