No ha podido ser. Agustinos tras caer en la pista del Amenábar tras una mala segunda parte que le condenó al fracaso. Al conjunto de Fernando Latorre tampoco le acompañaron los resultados de la jornada y no pudo evitar perder la categoría acabando la temporada en la penúltima posición. Los alicantinos parecían tener el partido bastante controlado en la primera parte con ventajas de dos goles y una defensa seria. Con 13-14 para Agustinos finalizaron los primeros 30 minutos con muy buenas sensaciones. Además, el empate podía ser un buen resultado en función de los resultados. La segunda parte estuvo marcada por la igualdad y por los nervios en ambos conjuntos. La permanencia estaba en juego y era una auténtica final.
El Amenábar dio un paso más en ataque apoyado por su público y Agustinos no podía frenar a su rival. La igualdad acabó a falta de 15 minutos para el final con 15-15 en el marcador. Los locales metieron una marcha más y ya Agustinos no volvió a ponerse por delante en resto del partido. Amenábar se hizo fuerte y cada ataque suyo era un gol. No falló muchos ataque el equipo alicantino, pero los suficientes para ser incapaz de acercarse en el marcador. Varias pérdidas consecutivas de los de Fernando Latorre acabó con las esperanzas. Los alicantinos robaron dos balones seguidos en los últimos compases del choque, pero apenas quedaba tiempo para empatar y el equipo lloró el descenso. Duro varapalo para Agustinos tras una temporada irregular en la que se mejoró con Latorre pero que arrastraba un déficit muy considerable de victorias con el anterior técnico.
