La designación del aragonés Marcos Latorre Gracia como árbitro principal del último partido en El Collao contra el Olot despertó la vertiente crítica del entrenador del Alcoyano, Mario Barrera.

«Hay cosas que no se entienden. Cómo pueden enviar a un árbitro de Zaragoza cuando el Teruel se está jugando con nosotros el descenso. Son cosas incomprensibles. A mí no me gusta hablar de esto y nunca lo he hecho, pero el segundo penalti sobre Lino es demasiado claro como para que no lo pite. No estoy culpando al colegiado de mala intención, porque todos nos equivocamos, pero este tipo situaciones no tendría que suceder solo por conservar la buena imagen», dijo el hispano-argentino en la sala de prensa de El Collao.

Cabe recordar que el cuadro gerundense se adelantó en el marcador al filo del descanso desde los once metros, mientras que a cuatro minutos del final el trío arbitral pasó por alto una pena máxima mucho más evidente de Roger Barnils sobre Hernán Lino. «Cuando me refiero a la designación no lo digo mandando un segundo mensaje. Jugándonos el descenso no sería lógico que manden a pitar a Teruel a un árbitro de Alicante, como no lo fue que venga a Alcoy uno de Zaragoza. Imagino que son cosas que se hacen sin mala intención porque sino tendríamos que cerrar la persiana e irnos. Se pueden mejorar sin ánimo de echarle la culpa al árbitro. Nosotros tenemos que seguir remando y hasta el final vamos a sufrir, pero vamos a salir de ahí abajo seguro».

Barrera insistió con que «no quiero entrar en el arbitraje, ni que suene a excusa. No quiero que ese mensaje llegue a los jugadores. Simplemente comento que no me parece lógico que un árbitro de Zaragoza venga a pitar a Alcoy. Nosotros teníamos que haber hecho más para ganar. Nada pasa porque sí, hemos de trabajar más duro para salir de la zona de abajo».

Con respecto al desarrollo del encuentro apuntó que «la primera parte fue muy pareja. Sabíamos que el partido lo teníamos que madurar. Estoy orgulloso de mis jugadores, pero hemos de entender que no podemos salir a la desesperada porque el partido dura noventa minutos. Hay que comprender la ansiedad que tiene el vestuario por solucionar esta situación».

«Somos conscientes del momento delicado que atravesamos y la responsabilidad que tenemos de intentar salir para darle una alegría a la afición que volvió a estar al lado del equipo en una noche espantosa», concluyó Mario Barrera, visiblemente contrariado.

Futuro

El Alcoyano encara en zona de descenso directo las cuatro últimas jornadas de la competición regular. Con todo, mantiene la ventaja de depender de sí mismo para eludir el temido retorno a Tercera División, un objetivo que pretende conseguir Mario Barrera. El próximo domingo (12.00 horas) rendirá visita al campo municipal de Ejea de los Caballeros, de césped artificial, donde el Hércules fue incapaz de ganar hace dos semanas (0-0) y, por ejemplo, perdió el líder Atlético Baleares.