Al Eldense se le hace de noche y no encuentra el camino del gol, lo que exaspera a los jugadores azulgranas al ver que necesitan crear varias ocasiones para acertar a perforar la meta contraria. De ese modo, las jornadas se agotan y los de Elda ven cada vez más lejos su presencia en el playoff de ascenso a Segunda B.

En ese sentido, el Deportivo encadena siete partidos seguidos sin cantar victoria, ni en Elda ni fuera de casa, al punto de que de los últimos 21 puntos que ha disputado sólo ha logrado tres, lo que suele sumar un equipo que lucha por no descender a Preferente, y es que el problema radica en la falta de gol del equipo, ya que en esas últimas siete jornadas ha marcado cinco tantos y ha encajado 14.

Tampoco fue un revulsivo el cambio de entrenador, ya que Paco Onrubia, técnico que sustituyó alm tándem Bauzá-Subirats, se ha encontrado con la plantilla cerrada tras los ajustes efectuados por la directiva en el mercado de invierno, donde redujo la nómina al no llegar la ayuda pactada con el anterior presidente José María Roig, cesado tras una moción de censura, aunque el club asegura que la plantilla marcha al corriente en los pagos salariales.

Restan ocho jornadas para acabar la Liga y el Eldense necesita ganar todo y que Olímpic de Xàtiva y Crevillente, con los que debe jugar, pierdan al menos tres de los ocho partidos que quedan para poder asaltar la cuarta plaza del grupo y disputar la promoción.