Voleibol

A vida o muerte. Así será el encuentro de la última jornada de la Superliga Femenina «Liga Iberdrola» que disputarán el próximo sábado 30 de marzo (19 horas) el ESD Granadas de Elche y el Madrid Chamberí en la capital de España. El equipo que gané conseguirá la permanencia en la máxima categoría del voleibol español y el que pierda bajará a la Superliga-2.

Será un choque de alta tensión entre dos rivales que se conocen mucho. De hecho, ambos lograron el ascenso la temporada pasada y se midieron en la fase por dar el salto a la Superliga.

Tanto ilicitanas como madrileñas están empatadas a 15 puntos en la clasificación, por lo que no dependen ni de terceros, ni de «set-average», ni de nada. Quien logre la victoria lo celebrará por todo lo alto y el que pierde llorará.

De todas formas, no es una mala situación para el Elche, ya que podía haber sido peor. Las chicas de Leo Passerine estaban obligadas a ganar ayer al colista Emevé Lugo, que ya está matemáticamente descendido, y tuvieron que sufrir y mucho para conseguirlo. De hecho, el partido se fue al quinto set y las ilicitanas iban perdiendo 1-2. La presión por estar obligadas a conseguir el triunfo se notó sobre la pista del pabellón de El Toscar que se llenó para animar a sus jugadoras.

El ESD Granadas de Elche comenzó muy bien y se impuso en el primer set, por un claro 25-16. Sin embargo, en el segundo no estuvieron al mismo nivel y se decidió en el desempate a favor de las gallegas, por 25-27. A pesar de ello, el equipo de Passerine se repuso y se adjudicó el tercer parcial, por 25-20. Parecía que lo tenían todo en la mano para sumar tres puntos. Sin embargo, en el cuarto parcial entró el miedo y las gallegas lo aprovecharon para terminar ganando 17-25. El partido se tuvo que dilucidar en el desempate. El Emevé empezó ganando el quinto set, pero, al final, llegó la remontada y el 15-12 final deja con vida y dependiendo de ellas a las ilicitanas.