Mario Fuentes dirigió ayer en Ibi la primera sesión de trabajo como máximo responsable técnico del Alcoyano. Con sensaciones renovadas, el madrileño afronta con ilusión el reto de aportar estabilidad y de estimular a la plantilla para abandonar la parte baja de la clasificación.

Fuentes se perfila como la apuesta del área deportiva para acabar el curso, máxime si bajo su batuta se logra romper el próximo domingo contra el Cornellà con la prolongada sequía de victorias en casa. Con todo, habrá que esperar a conocer la versión oficial del club a través de su presidente, Juan Serrano, que comparecerá esta mañana en rueda de prensa con la intención de calmar los ánimos y pedir el respaldo de la afición.

Adiós de Mir

Paralelamente, Vicente Mir selló ayer la rescisión del contrato que ligaba al Alcoyano hasta junio de 2020. El preparador valenciano posibilitó el acuerdo tras renunciar a la mitad de la ficha del próximo curso, todo un gesto.

Mir echó el cierre a su corta estancia en Alcoy dejando al equipo en promoción de descenso, pero a cuatro puntos de la mitad de la tabla. La falta de pegada, con cuatro lanzamientos de penalti fallados incluidos, unido a la falta de efectivos por el rosario de lesiones que asoló al Alcoyano durante el curso precipitaron su despido.