El HLA Alicante quiere ascender a la LEB Oro por la vía rápida. El conjunto lucentino firmó su undécima victoria consecutiva y su primera en la fase de ascenso tras aplastar al Zornotza con un tercer cuarto brutal en el que endosó un claro parcial de 1-23 con los impresionantes triples de Schmidt. Fue la sentencia de un partido que se puso cuesta arriba en la primera parte pero que los de Rivero supieron darle la vuelta.

El HLA salvó una situación crítica en el segundo cuarto cuando el marcador reflejaba un escalofriante 41-25. Los triples del Zornotza estaban matando al conjunto alicantino que sin embargo no se vino abajo y con un parcial de 4-15 llegó al descanso con un tranquilizador 45-40. El conjunto vasco basó su producción en ataque en su altísimo porcentaje de triples.

Cinco anotaron en el primer cuarto y cuatro en el segundo. Ante tal exhibición exterior, el HLA no encontraba el modo de taponar la herida y las cosas se iban complicando. Un buen Larsson en la pintura y el acierto de Pitts y Schmidt alivió a los alicantinos antes del descanso dejando el partido totalmente abierto.

El inicio del encuentro fue fulgurante. Cinco triples del Zornotza por cuatro del HLA. Batalla en el perímetro en un igualado primer cuarto que se convirtió en poco menos que en un concurso de triples. El Zornotza siempre fue por delante pero los alicantinos no lo dejaron marchar con un inspirado Pitts, puro talento que se ha convertido en la gran estrella del HLA Alicante.

El segundo cuarto pudo ser trágico pero el conjunto de Rivero supo reaccionar a tiempo manteniendo la calma y aprovechando el bloqueo de los vascos desde la línea de tres. A partir de ese momento, el HLA logró construir y convertir en un mal menor la diferencia de cinco puntos antes del descanso (45-40). El tercer cuarto fue brutal para un HLA más reconocible en defensa y con un feroz ataque que sentenció el partido con un espectacular parcial de 1-23 con tres triples consecutivos de un magistral Schmidt, que volvió loco al Zornotza con sus estratosféricos lanzamientos. Pitts apuntilló a los vascos para cerrar el tercer cuarto con un claro 59-76, un decorado que nada que ver con el que se vio en la primera parte del choque disputado en Amorebieta. El HLA era una máquina de anotar y su rival una víctima más.