La selección española cumplió con los pronósticos y arrancó su andadura en el Mundial de Alemania y Dinamarca con una cómoda victoria sobre Baréin, en un encuentro en el que pese a la notable distancia que separa a ambos conjuntos, los «Hispanos» nunca lograron brillar. Ni las continuas advertencias del técnico Jordi Ribera en las jornadas previas sirvieron para evitar los numeros problemas que tuvo España para contener los unos contra uno en los que Baréin convirtió cada uno de sus ataques. Un problema que personificó como nadieAlsayyad, que con sus sorpresivos lanzamientos en apoyo y sus eléctricas penetraciones, firmó casi la mitad de los once goles que Baréin sumó en la primera parte.