El Sevilla y el Atlético de Madrid abrirán este domingo el año con un duelo en las alturas y de postín en el Sánchez Pizjuán, un clásico del fútbol español entre dos históricos que, como regalo de Reyes, se juegan la segunda plaza de LaLiga Santander para seguir al acecho del líder, el Barcelona.

Tras dos semanas sin fútbol por las vacaciones navideñas, sevillistas y atléticos llegan al choque en un gran momento: los colchoneros, segundos con 34 puntos y el aval de haber perdido sólo un partido de Liga esta campaña (2-0 ante el Celta); y los andaluces, terceros con dos puntos menos y diez victorias seguidas en casa -seis en Liga- entre todas las competiciones.

Ello concede un atractivo especial a una tarde marcada por la ilusión de los Reyes Magos, en la que el Sevilla quiere seguir soñando con hacer cosas importantes este año, dar juego a esta Liga y mantener el empaque en su fortín del Sánchez Pizjuán, un estadio siempre difícil, aunque no se le da mal al Atlético, sobre todo desde que el argentino Simeone, un exsevillista, llegó a su banquillo.

Los rojiblancos llegan con los rumores sobre las posibles salidas de Lucas Hernández y Godín.