"Las chicas vienen con mucha ilusión, pues saben que nos enfrentamos contra quizás el equipo más potente del mundo y en su propio feudo. Pero es también un reto importante, ya que no hay nada que perder", declaró Margets.

El capitán de España, que ha ganado esta competición en cinco ocasiones con Arantxa Sánchez Vicario y Conchita Martínez al frente, reconoció que "sería una gran gesta en caso de victoria".

La confianza de Margets está depositada en Anabel Medina, Lourdes Domínguez, Nuria Llagostera y Laura Pous.

Todas las jugadoras, sin excepción, se mostraron contentas con el estado la pista de Moscú, en la que se sienten cómodas tras varios días de entrenamientos.

El conjunto español sufre la baja de Virginia Ruano, lesionada en la espalda durante la primera ronda del torneo de Charleston, contra la italiana Francesca Schiavone.

La ausencia de Ruano ha sido cubierta por Nuria Llagostera, una vez solventados sus problemas de muñeca, y Pous, que debuta en el equipo nacional.

El equipo ruso, aunque no cuenta con su mejor tenista María Sharápova, que a causa de una lesión en el hombro derecho no pudo debutar con Rusia, se perfila como favorito en esta eliminatoria por disponer de varias tenistas entre las mejores del mundo.

Lidera el equipo Svetlana Kuznetsova, número 5 del mundo, que ha vuelto al conjunto dirigido por Shamil Tarpíschev tras tres años de ausencia y cuya actual forma no deja dudas de que en Moscú va a exhibir su mejor tenis.

La número dos de Rusia es Nadia Petrova, la novena raqueta del mundo, que al igual que Kuznetsova se siente cómoda sobre la pista de tierra batida.

Completan el equipo ruso Anna Chakvetadze (número 11); y Elena Vesniná (número 70);, ambas de 20 años y con experiencia de jugar juntas en dobles, aunque también es posible que Tarpíschev opte por la pareja Kuznetsova-Petrova.

La líder del equipo español, Anabel Medina, número 29 de mundo, se unió a sus compañeras el pasado miércoles por la noche, pero tuvo tiempo suficiente para aclimatarse a Moscú y adaptarse a la cancha del pabellón cubierto de Luzhnikí, escenario del duelo con Rusia.

Medina, de 24 años, que ya ha disputado ocho torneos de Copa Federación, es la tenista que mejor conoce a sus rivales rusas, pues en dos ocasiones jugó con Kuznetsova y perdió, y también fue derrotada por Petrova en su primer y único encuentro hasta ahora.

"En este equipo español no hay figuras estelares, pero de todas formas, son representantes de un país considerado una potencia del tenis, que posee cinco títulos de Copa Federación", recuerda hoy el diario "Izvestia" en referencia al período de 1991-1998.

Rusia se proclamó campeona de Copa Federación en dos ocasiones, cuando en 2004 y 2005 logró derrotar a Francia en sendas finales.

A pesar de su condición de favorita en esta eliminatoria, las discípulas de Tarpíschev intentan eludir los ánimos triunfalistas y tratan con respeto a las españolas.

"Somos más fuertes que las españolas, pero no podemos relajarnos y nos preparamos para el encuentro con toda seriedad", dijo Kuznetsova, que habitualmente se entrena en Barcelona y conoce el tenis de España de primera mano.

Al comentar los ánimos del equipo de cara al encuentro con España dijo: "Experimentar nerviosismo es algo normal, más importante es superar ese estado, pues el que lo mejor lo consigue, gana".

El actual duelo entre Rusia y España será su quinta cita desde 1982, con un balance de 3-1 a favor de las tenistas rusas.

Al mismo tiempo, esta eliminatoria supone el primer encuentro con España para la Rusia pos-soviética, ya que por última vez los dos equipos se enfrentaron en 1990, cuando aún existía la URSS.

La primera jornada de los cuartos de final Rusia-España se disputará mañana, sábado, a partir de las 14.00 horas (10.00 GMT);, con dos partidos en individuales en el pabellón Sport Arena de Luzhnikí, con aforo para unos 6.500 espectadores.

En la segunda jornada, el domingo, a partir de las 13.00 horas (09.00 GMT); se jugarán otros dos partidos individuales seguidos por el choque de dobles.