El Real Madrid, vigente campeón de Europa, encara con total tranquilidad la última jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones, con su primer puesto certificado matemáticamente, pone en juego el orgullo ante el equipo que le venció en Moscú, un CSKA que se juega su continuidad en Liga Europa.

Con la imagen siempre en juego del rey de Europa, campeón de las tres últimas ediciones de la 'Champions' y cuatro de las cinco últimas, el Real Madrid encara el último encuentro del grupo con los deberes hechos. Da la oportunidad a Solari de dar minutos a jugadores que quieren escapar de su actual rol tras perder importancia, como Isco Alarcón o Marco Asensio, y premiar a jugadores que han pasado a un segundo plano como Keylor Navas.

El Real Madrid reaccionó bien, con pleno de victorias desde la segunda jornada, cuando cayó por sorpresa en la visita a Moscú ante el CSKA.