El Elche Mustang estuvo a punto de dar la sorpresa frente al potente Rocasa Gran Canaria y demostró que una vez que recupere a todas las lesionadas y tenga al cien por cien a toda la plantilla va a ser un conjunto temible capaz de superar a cualquiera, incluso a los grandes, sobre todo en el pabellón de Carrús, y luchar por la parte alta de la clasificación.
El conjunto de Joaquín Rocamora plantó cara y jugó de tú a tú al cuadro isleño, actual subcampeón de la competición europea de la Challenguer Cup y tercero en la Liga de la temporada pasada.
Las ilicitanas aguantaron muy bien durante los primeros 30 minutos en el que el marcador fue siempre muy igualado. El Elche consiguió ponerse por delante en el marcador y al descanso se llegó con uno abajo en el electrónico.
El Rocosa, que era de los pocos equipos de los denominados grandes que todavía no había sufrido en el pabellón de Carrús, ayer ya supo lo que es esa experiencia en la cancha del Mustang.
Las canarias plagadas de jugadoras internacionales, tanto con España como con Cuba y Argentina, que tiene a la capitana de la selección española, la portera Silvia Navarro, en sus filas; tuvieron que sudar y mucho para llevarse la victoria. Su mayor profundidad de banquillo le favoreció, pero hasta el pitido final no pudieron celebrar el triunfo.
La buena noticia para el Elche Mustang fue el regreso a las pistas de Ana Martínez, después de más de un año lesionada de la espalda. La internacional ilicitana jugó sus primeros minutos, Rocamora no la quiere forzar y va a ir entrando progresivamente, pero demostró su enorme calidad marcando, incluso, dos goles. Todo una alegría para la familia del Club Balonmano Elche.
