Pedro Rivero ya tiene prolongación en la cancha. Será Quique Garrido. El exbase del Palencia deja la LEB Oro después de nueve temporadas al máximo nivel para dirigir al HLA en su única meta: el ascenso. La amistad con Gillermo Rejón (con el que coincidió en el club castellano en la campaña 13-14) ha sido determinante. Garrido responde al perfil que desarrollaba como director de juego el ahora entrenador de la Fundación. Con 36 años, se trata de un jugador sobrio, con buenos porcentajes desde el perímetro sin necesidad de asumir mucho tiro, que intrerpreta bien el baloncesto en campo abierto y que hace circular bien la bola en el ataque estático. Garrido es la novena pieza tras Devin Schmidt, Vladimir Nemcok, Kingsley Obiekwe, Nacho Díaz, Chumi Ortega, Álex Galán, Boubacar Sidibe y Georvys Elías. El año pasado se ganó la titularidad partiendo como tercer base y disputó el «play off» de ascenso a la ACB (cayó en semis con Manresa).
