El segundo asalto también fue para el HLA Alicante. Esta vez a lo grande en un Centro de Tecnificación que recordó al de las mejores épocas. Los alicantinos ametrallaron al Navarra desde la línea de tres puntos y no dejaron opción desde el principio del partido. Con esta victoria el conjunto de David Varela se sitúa en la eliminatoria con una clara ventaja de 2-0. La serie se traslada ahora a Navarra donde los alicantinos jugarán el viernes a partir de las 20.30 horas. Será su primera oportunidad de pasar a la siguiente ronda. En caso de derrota el cuarto partido se disputaría el domingo también a domicilio.

El encuentro fue un monólogo del HLA Alicante. Hasta 18 triples anotaron los lucentinos en un espectacular acierto desde el perímetro. El dominio fue absoluto ya desde el primer cuarto. Hasta 5 triples anotó Nacho Díaz, que estás siendo el mejor de los alicantinos en los dos partidos. Lobo, con 4 triples, volvió a ser un seguro de vida y Chapela firmó un encuentro muy completo.

Ayer se vivió la mejor entrada de la temporada en el Pedro Ferrándiz. Espectacular ambiente en las gradas para apoyar a un equipo que agradeció al final del choque todo el ánimo. Esta vez el HLA Alicante se llevó la victoria sin necesidad de sufrir, algo a lo que se había acostumbrado a lo largo de la temporada.

Dos victorias en dos partidos ante un rival que les ganó en Alicante en la fase regular. La plantilla está mentalizada para un «play off» del que sólo saldrá un único equipo que ascenderá a la LEB Oro. Ahora los de David Varela deberán jugar en un ambiente hostil en busca de la victoria que les dé el pase a la siguiente ronda.

Todos sumaron en el partido de ayer. Buen trabajo desde el perímetro pero también en las labores defensivas. El HLA llegó al descanso con un impresionante 50-26. Hacía mucho tiempo que el equipo alicantino no anotaba tantos puntos en los dos primeros cuartos. Fueron dos cuartos perfectos que dejaron la victoria más que encarrilada. Tras el descanso, misma intensidad en los jugadores alicantinos para no permitir ninguna sorpresa.