El Alavés logró una sufrida victoria en el partido disputado hoy en Ipurua ante un Eibar que salió dormido y lo pagó con un gol en contra. Después, el encuentro sólo tuvo un dominador, pero no fue el día de los de Mendilibar en ataque, y los armeros dijeron adiós a sus aspiraciones europeas aunque dejaron un buen sabor de boca pese a ser ya el sexto partido consecutivo en el que no logran sumar los tres puntos.

No tardó mucho el Alavés en adelantarse en el marcador. Antes del minuto 5, Sobrino desbordó por banda izquierda y tuvo la sangre fría de buscar a Guidetti en la frontal, que la puso junto al poste para adelantar a los visitantes.

El Eibar debía remontar prácticamente desde el principio, pero en los minutos posteriores al gol los de Mendilibar parecieron acusar el golpe y abusaron del pelotazo, aun teniendo a jugadores como Orellana, Pedro León o Inui en la zona de ataque.

Los locales seguían cometiendo errores en la salida del balón, lo que aprovechaban los de Abelardo para salir como balas al contragolpe, ante un Eibar que se veía desbordado en esos primeros compases del derbi. Con el paso de los minutos, el Eibar fue reencontrándose con su juego de achuchar al rival sin dejarle respirar, y se hizo más reconocible el juego de Mendilibar. Los de Abelardo parecían cómodos en su labor de defender y esperar algún fallo defensivo de un Eibar que seguía jugando en campo rival, pero con más intención que acierto de cara a puerta.