La sección de fútbol sala del Elche CF ya puede respirar tranquila. A falta de tres jornadas para finalizar la Liga, los ilicitanos han asegurado su permanencia en Segunda División y lo han hecho a lo grande: sumando un gran empate frente al líder Valdepeñas, que, muy probablemente, la próxima temporada estará en Primera División.

Los franjiverdes volvieron a mostrar el excelente nivel de la segunda vuelta de la competición, incluso recibieron el gol de la igualada a tres a falta de cinco segundos para final cuando a falta de 12 Rubi había anotado el 3-2.

Fue una pequeña decepción, pero que no pudo empañar la alegría en una plantilla, cuerpo técnico y directiva que han tenido un año difícil y que en la primera vuelta vieron como el fantasma del descenso planeaba muy seriamente con un pésimo inicio de Liga.

La llegada de Carlos Sánchez al banquillo supuso un revulsivo decisivo y se ha demostrado que con el técnico madrileño desde el principio se podría haber aspirado, incluso, a metas más altas.

Ahora, cuando quedan tres partidos por disputarse, el Elche tiene once puntos de ventaja sobre el Prone Lugo, que ayer perdió en su cancha contra el Bisontes de Castellón (5-7) y descendió a Segunda División B.

En las tres jornadas que restan, el objetivo de los ilicitanos es acabar lo más arriba posible en la clasificación y que el portero Rafa, que ayer regresó, vuelva a jugar.