El Barça sufrió ayer en Cornellá-El Prat para sumar un punto frente al Espanyol (1-1), en una vigésimo segunda jornada de LaLiga Santander marcada por la lluvia, las rotaciones visitantes de cara al choque de Copa del Rey frente al Valencia del próximo jueves y la polémica surgida semanas atrás tras las declaraciones de un Gerard Piqué protagonista también sobre el césped.

El central volvió a ser el centro de atención de un duelo en el que su tanto igualó el gol inicial de Gerard Moreno, llenando de tensión el final de un choque trabado por la rivalidad y las condiciones del césped. La celebración del defensor mandando callar a la grada encendió los ánimos de la hinchada y los jugadores rivales.

A pesar de la importancia del duelo, Ernesto Valverde no dudó en reservar piezas clave en el esquema blaugrana con la vista puesta en la vuelta de la Copa del Rey, dejando en el banquillo a los laterales Jordi Alba y Sergi Roberto, Ivan Rakitic e, incluso, a un Leo Messi que cedió su lugar en el once a Paco Alcácer.

El que sí estuvo fue un Philippe Coutinho que se volvió a cruzar con el equipo con el que debutó como culé y con el que conoció LaLiga en su etapa como «perico» en el curso 2011/2012. El brasileño fue uno de los más activos de un inicio igualado y tuvo la ocasión más peligrosa con un disparo que se estrelló en el travesaño de la portería local. Bajo la intensa lluvia presente en Cornellà-El Prat, blanquiazules y azulgranas disputaron una primera mitad desequilibrada en el dominio de la posesión pero igualada en las ocasiones. Si Coutinho tuvo la más peligrosa de los visitantes, su compatriota Leo Baptistao amenazo la meta de Marc-André Ter Stegen con un disparo potente y un cabezazo que se marchó alto.

La ordenada defensa de los de Sánchez Flores se vio ayudada por un terreno de juego encharcado, que dificultó aún más los intentos de circulación de balón barcelonistas. La zona del centro del campo fue la más castigada por la constante precipitación de agua. El técnico del Barcelona trató de desatascar el partido con la entrada de Messi y Sergi Roberto a la hora de partido, aunque la sustitución que cambió el rumbo del partido fue la inclusión de Sergio García por Jurado en los «pericos». El veterano jugador, canterano del Barça, ocupó el carril derecho para asistir en sus primeros minutos a Gerard Moreno. El delantero cabeceó un buen centro de su compañero para batir a Ter Stegen con su noveno gol de la temporada.

Con todo a favor para los espanyolistas, en un terreno impracticable, Piqué apareció para alimentar el morbo que precedió al derbi y silenciar al RCDE Stadium. El central aprovechó un córner para cabecear a gol y marcar el tanto del empate, mandando callar a una hinchada que le había silbado durante el encuentro.

El gesto en la celebración indignó a la afición y a alguno de los jugadores rivales, incluso generando una trifulca minutos después tras una entrada de Gerard Moreno al defensor blaugrana. El empate, coloca a los locales a ocho puntos de los puestos de descenso, mientras que mantiene al Barcelona invicto y lejos de sus perseguidores.

Derbi de alta tensión

Gerard Moreno aseguró tras el choque que es «normal» que el derbi ante el Barça «se viva con tensión», después de encararse con Piqué en los minutos finales. En la misma sintonía se pronunció Iniesta: «Son cosas que pasan, pero fuera del campo se olvidan», deslizó el capitán culé.