Los compromisos ligueros en el campo de El Collao se han convertido en una auténtica pesadilla para el Alcoyano. El Ebro, apoyado en un planteamiento defensivo reforzado con un gol a los dos minutos de juego, infligió a los blanquiazules la quinta derrota del curso en su feudo sesgando de un plumazo las ilusiones de la afición que veía factible conectar con el grupo de cabeza tras el botín de seis puntos logrado en las dos últimas salidas consecutivas frente a rivales de entidad y prestigio como el Cornellà y el Hércules de Alicante.

El entrenador, Galiana, repitió en El Collao la defensa de 5 que le ha permitido salir a flote y desterrar, de momento, el fantasma de la destitución. Con todo, el planteamiento se resquebrajo apenas iniciado el partido. El conjunto aragonés sacó los colores a la zaga sorprendiendo en un saque de banda. Javi cabezas cazó el rechace de Mario Arques colocando el balón con precisión lejos del alcance de Miguel Bañuz.

El consuelo que queda en estos casos pasa por echar un vistazo al cronómetro y ver que queda un mundo para sobreponerse y evitar un nuevo desastre. Iván Forte y López Silva lo intentaron con sendos disparos desviados hasta que se produjo la acción que perfectamente podría haber variado el signo del partido. Álvaro García cayó dentro del área dando la sensación de haber sido objeto de un claro penalti para todo el estadio excepto para el colegiado, el granadino Antonio Artacho Cobo, que dejó seguir el juego tras intercambiar impresiones con el asistente.

Gato, el héroe de Cornellà siete días antes, disfrutó de la mejor oportunidad antes del descanso. El alicantino encaró a Salva e intentó driblarle. El portero adivinó la intención y le arrebato el balón. Gato acabó por los suelos por la inercia y amonestado por el colegiado que interpretó erróneamente simulación de pena máxima. Con esta acción, forjada al filo de la media hora, agonizó prácticamente el contenido del primer tiempo.

Galiana, consciente de la necesidad de pisar más el área rival, echó el resto en la reanudación con el doble cambio de Mariano Sanz y Eldin en detrimento de Mario Fuentes y Mario Arques. El punta bosnio protagonizó la primera acción destacada tras el descanso, pero el disparo desde el interior del área lo envío a córner Salva, en estado de gracia. El Ebro, bien atrincherado y ordenado en su área, apostó por el contragolpe para tratar de sentenciar el encuentro. Javi Cabezas llevó el balón hasta la línea de fondo asistiendo a Adri Cuevas cuyo disparo fue repelido por el poste. De nuevo estuvo a punto de marcar Borja Martínez de tiro raso, pero lo evito el cruce providencial de Barreda. Galiana quemó el último cartucho incorporando al ecuatoriano Hernán Lino quien desaprovechó una última oportunidad para haber salvado al menos un punto.

Con el pitido final el Alcoyano firmó una de las peores rachas que se le recuerdan en el campo de El Collao. Tres meses sin conseguir la victoria y sin marcar un gol.

Los blanquiazules jugarán el próximo domingo (12.00) en la Ciudad Deportiva del Villarreal contra el filial amarillo, segundo clasificado y único equipo capaz de seguir la estela del líder. Otra prueba de máxima exigencia a domicilio para los de Galiana.