El apoyo de la directiva blaugrana a la causa independentista, con el presidente Josep Maria Bartomeu a la cabeza, se ha cobrado la primera ruptura con una peña oficial del club. Tras una asamblea extraordinaria de socios, la Peña Barcelonista Elda decidió por unanimidad dejar de pertenecer oficialmente al club catalán, pese a que la documentación pertinente para tramitar la baja todavía no ha sido remitida. En ese sentido, el tesorero de la entidad eldense, Paco Orgilés, confirma lo acordado por la masa social: «El cien por cien de los votantes acordó que dejáramos de ser peña oficial del Barcelona, aunque nuestra inquietud y nuestro corazón están con el equipo, eso nadie nos lo va a quitar».

Las continuas insinuaciones políticas de la directiva culé han sido el detonante de esta drástica decisión, ya que «no compartimos que el presidente mezcle el deporte con la política», afirma Orgilés, añadiendo apesadumbrado que «nos duele tomar esta decisión, pero vamos a seguir siendo peña sin pertenecer al club, de la manera en la que hemos estado constituidos durante más de 40 años», anuncia Orgilés.

Efecto dominó

La ruptura acordada por los socios de la Peña Barcelonista Elda puede animar a otras peñas de la geografía española a dar idéntico paso ante la inclusión cada vez más evidente de Bartomeu y su junta en el desafío secesionista: «Nuestra decisión puede tener efecto dominó, pero no es nuestra intención ni mucho menos. Cada uno es libre de decidir lo que considere», señala el tesorero de la entidad eldense, quien deja una puerta abierta a reestablecer la relación oficial «cuando el Barcelona sea un club deportivo», recordando así una frase del mítico Nicolás Casaus, vicepresidente del Barça durante más de 20 años: «El Barcelona es un club deportivo, catalán, español y universal. Eso lo dijo Casaus, que era un señor».