Javier Abinzano sabía lo que hacía cuando envió un mensaje de socorro a « Zupo» Equisoain. El Benidorm era colista con sólo 7 puntos y abocado al descenso. Sólo un milagro podía evitar despedirse de la Asobal. Y allí estaba el técnico navarro. No dudó ni un instante en aceptar el reto que le propuso su amigo y tras una primera toma de contacto con los jugadores contagió de optimismo a todo su entorno. «A este equipo lo vamos a salvar», aseveró Equisoain poco antes de comprometerse hasta final de temporada.

El primer examen del técnico no podía ser más exigente. Partido en casa ante un rival directo como el Guadalajara. La victoria daba esperanza y la derrota dejaba al Benidorm con pie y medio en la División de Honor Plata. La mano del técnico navarro se notó en su debut y la victoria se quedó en casa dando paso a la esperanza.

La comunión con la plantilla ha sido perfecta. Equisoain se convirtió en el faro de los jugadores y sus palabras en la pista iban a misa. Entrenador duro, con carácter, gesticulador... La renovación por dos temporadas recompensa la proeza que acaba de conseguir, similar a la conseguida p0r Trifón Poch con aquella permanencia milagrosa en el Lucentum o con Txus Vidorreta años después.

Equisoain hizo que el Palau de Benidorm se viera con más público que habitualmente y que la gente se haya enganchado al Benidorm. «La manera de salvarnos en el último partido empatando ante el Ángel Ximénez hace que la gente tenga ahora ganas de balonmano. Además, los jugadores se han dejado la piel en cada uno de los partidos», señaló ayer el técnico navarro desde Pamplona, desde donde se encargará de encabezar el nuevo proyecto.

Equisoain se caracteriza por tener las cosas claras y decirlas. «Quiero una plantilla más corta pero de más calidad», apuntó el preparador. «No tengo miedo a las lesiones ni a nada, pero es mi filosofía y lo que llevo haciendo durante 25 años. Prefiero un dos que dos unos», expone con claridad el entrenador-milagro como ya le empiezan a conocer en Benidorm.

La gesta realizada ha hecho que varios equipos extranjeros se hayan fijado en él para la próxima temporada. «Es la recompensa tras el trabajo. Tenía dos ofertas por más dinero que aquí, pero he tenido claro que mi deseo siempre ha sido seguir en Benidorm. Mi relación con la directiva es muy buena y aquí encuentro calidad de vida. Además, estamos en una categoría que domino, me encuentro en mi hábitat y esperamos seguir dando alegrías». Palabras de Equisoian, el artífice de que desde su llegada el Palau no ha visto la derrota. «Esa era la hoja de ruta que nos trazamos. Ser fuertes en casa y ganar al menos un partido fuera de casa». Dicho y hecho, el Benidorm se convirtió en uno de los equipos más poderosos en casa de la categoría. «Para mí esto es como si hubiera conseguido un título, cogí al equipo cuando estaba prácticamente desahuciado y lo hemos dejado en la Asobal».

Equisoain ya sabe que se marchan Víctor Sáez, David Jiménez, y Héctor González pero no le inquieta. «Ahora entramos en un proceso de negociación con jugadores, haremos la mejor plantilla posible aunque depende de las ayudas que tengamos».