La junta de accionistas del Hércules aprobó ayer las cuentas del ejercicio 2015-16, en las que se arrojan unas pérdidas de 6,8 millones de euros después del dictamen de la Comisión Europea que le obliga a devolver 6,9 millones al Instituto Valenciano de Finanzas (IVF). El Hércules iba a registrar un pequeño superávit de 77.000 euros en las cuentas del último ejercicio pero se vio obligada a incluir una «provisión por prudencia societaria» para cubrir el dictamen de Bruselas, lo que le ha llevado a pérdidas.

No obstante, en el informe facilitado por el club a sus accionistas se explica los pasos iniciados por la entidad para defenderse, que incluyen una demanda de anulación de la decisión de la Comisión ante el Tribunal Europeo, así como la solicitud de suspensión cautelar. Las cuentas aprobadas incluyen también un presupuesto de dos millones de euros para el ejercicio 2016-17.

En los ingresos no se contempla la taquilla del partido de Copa ante el Barcelona, que superó el medio millón de euros. Tampoco contabiliza los 1,8 millones que el club ingresará por la demanda contra la Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunidad.