El juzgado de lo Social número 1 de Alicante ha desestimado la demanda que presentó José Luis Lorenzo Ortega, actual concejal de Deportes del Ayuntamiento de San Vicente, contra el Hércules por un supuesto despido improcedente.

La jueza rechaza «íntegramente la demanda» y considera probado que Lorenzo sólo acudía «de forma aleatoria» a las instalaciones del Rico Pérez «en virtud de un favor del (entonces) entrenador Quique Hernández».

El ahora concejal de Deportes alegó que realizaba funciones de asesor técnico-táctico, con una remuneración de 500 euros al mes, extremos que fueron negados tajantemente por el presidente del club Carlos Parodi y la contable Trinidad Pelegrín.

El fallo de la jueza da por buena la tesis de la entidad blanquiazul, que consideraba a Lorenzo un «merodeador» que no realizó «ningún trabajo remunerado y que tampoco fue contratado por nadie» del club.

Según la sentencia, el ahora concejal «nada prueba ni alega sobre la jornada laboral y las concretas funciones realizadas, limitándose a afirmar que trabajó como analista desde julio de 2013, con un salario de 500 euros».

Por su parte, el presidente del Hércules, Carlos Parodi, afirmó que «no conocía al demandante y que no lo había visto nunca por el Rico Pérez» a pesar de que «acudía a menudo al vestuario» y a los despachos destinados a los técnicos.

Lorenzo presentó su demanda el 10 de febrero de 2014, en la que pedía la declaración de improdecencia o, subsidiariamente, nulidad del despido verbal del que había sido objeto en diciembre de 2013.

El pasado 5 de mayo tuvo lugar el acto de conciliación y el juicio, en el que el los representantes del club blanquiazul rechazaron la demanda «al no existir contrato ni relación laboral», aduciendo que el denunciante se valió de la confianza que había adquirido con el entonces entrenador (Quique Hernández), quien le permitió acudir a las instalaciones donde entrenaba el Hércules.