Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La clave Palop

Paredes desvela la gran labor motivadora del guardameta valenciano en el vestuario de la Roja

Francisco Monzón, directivo de la ONCE, Jesús Paredes y Andrés Palop, actual entrenador del Alcoyano, durante el acto de ayer en Madrid. LOF

«Para ayudar a conseguir el título en el Eurocopa de 2008, la obra maestra de Luis Aragonés, hubo un jugador determinante, un futbolista que no jugó un solo minuto, pero cuya aportación fue enorme: El tercer portero Andrés Palop». La frase salió ayer de los labios de Jesús Paredes, preparador físico y hombre de confianza del seleccionador que recondujo a España al camino del éxito en el torneo continental.

Bajo el epígrafe «El fútbol que nadie ha visto, génesis de la Roja», Jesús Paredes desgranó ayer en el salón de actos de la Fundación ONCE de Madrid el estímulo «anímico creado en torno a la selección española como complemento y último punto del plan de trabajo del 'Sabio de Hortaleza' centrado en inculcar una identidad» al fútbol de la selección española.

Ante una nutrida audiencia de afiliados invidentes, fueron pasando por los altavoces de la sala los audios recogidos en el vestuario de la Roja en los momentos previos a cada uno de los partidos que disputó España en esa Eurocopa hasta llegar a la final ante Alemania.

Ese momento íntimo, grabado desde uno de los rincones del vestuario, quedó designado como «el cuarto pilar básico» de un desarrollado plan de trabajo que culminaba la labor previa en «estrategia, táctica y técnica».

«Luis tenía muy en cuenta el concepto de la identidad de grupo, el conjunto de invididualidades entendidas como una unidad» recordó Paredes, «todos los jugadores, incluidos los que se quedaban en el banquillo, disputaban el partido. Eran considerados integrantes del equipo al mismo nivel».

A partir de ahí, el prepador físico fue desgranando la aportación de Palop en momentos puntuales de la competición para apuntalar el trabajo de Aragonés. Uno de ellos, quizá el más destacado, apareció con la lesión de David Villa en la semifinal ante Rusia. El asturiano, el ariete más resolutivo de la competición, se despedía del torneo en la primera parte del choque frente a los rusos, que llegaron al descanso con un 0-0, un resultado abierto para todo. «Y ahí apareció Palop», apuntó Paredes a la audiencia, un instante antes de pulsar el 'play' para hacer sonar un documento inédito: «Vamos chicos, vamos chicos... que ahí tenemos a un compañero que se ha quedado jodido... vamos a darle una alegría. Vamos, eh... por nosotros y por él, vamos. Nuestro estilo, chicos»

La arenga del tercer guardameta sólo fue interrumpida por Luis: «Somos dueños del centro del campo. Y el centro del campo es el que gana el partido»

En la reanudación de la semifinal, España borró del campo a Rusia completando una de las partes más brillantes que se le recuerdan a la Roja.

Presente en la sala de la madrileña calle Prim, Paredes hizo subir al escenario a Andrés Palop para recordar aquellos inolvidables momentos, acompañados por sonidos que el valenciano recordaba, pero que no había vuelto a escuchar.

El preparador físico madrileño recordó que conoció a Palop siendo un chaval del filial del Valencia, que le llevaron a un entrenamiento para hacer un trabajo específico con Viola, cuando el equipo de Mestalla era dirigido por Luis Aragonés. «Le lanzamos doscientas veces a puerta, estaba destrozado y se le salían los ojos de la órbita, pero pedía más», desveló Paredes.

El pormenorizado relato también pasó por los temidos cuartos de final ante Italia, partido resuelto en la tanda de penaltis. En ese punto, el micro colocado en el banquillo español vuelve a recoger la voz imperante de Andrés Palop, que instantes antes ha entrelazado los brazos de los suplentes para transmitir fuerza a Iker Casillas. «Vamos, que lo va a notar: La para, la para, la para... hostia». E Iker la paró.

Acto seguido, en el lanzamiento definitivo que iba a dar el pase a España, superando esa barrera de cuartos que tantas veces le amargó, de nuevo la voz del valenciano sale a relucir ante los oídos del lanzador: «Vamos Cesc, vamos Cesc, positivo, vamos, chicos, todos con él, todos juntos, vamos, vamos....»Y Cesc no falló.

En opinión de Paredes, dejar en la cuneta a los italianos soltó definitivamente las piernas del equipo español, ya muy firme hacia su destino final. Ese triunfo fue celebrado con una canción creada por Palop que acabó coreada por todos los jugadores en el vestuario un segundo antes de que apareciera el Rey Juan Carlos para felicitar al conjunto. El valenciano encaró el pasillo desde el césped al vestidor utilizando la letra y música del estribillo del himno italiano con una 'ligera' variación al final: «Italiá, Italiá.... por el aire va, por el aire va»

El encuentro cumbre de la Eurocopa, al final ante Alemania, deparó el inolvidable discurso de Aragonés: «Del subcampeón no se acuerda nadie», «Nosotros hemos venido aquí a ganar la Copa de Europa», «Como somos mejores, les vamos a ganar», «Se ha lesionado Wallace (por Ballack) (risas), pero peor, el que salga correrá más». Arenga tras arenga que culminó con un frase antológica cuando se abrió la puerta del camerino. «Vámonos... y que no les pase como al galgo de Lucas... que cuando salió la liebre le cogió cagando».

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats