El Alcoyano recibe al líder Villarreal B (18.00 horas) con el objetivo de encadenar la segunda victoria en El Collao y de ratificar que aspira a moverse por la zona alta de la clasificación.
Con todo, el filial pasa por ser en la actualidad uno de los equipos más solventes del grupo III, tanto de local como de visitante. El cuadro de Paco López se ha impuesto con rotundidad en sus dos salidas: L'Hospitalet (1-2) y Hércules (0-4). A estos datos cabría añadir la victoria de los amarillos el pasado curso (0-3). Curiosamente, éste ha sido el último partido de Liga que ha perdido el Deportivo en El Collao, hace ahora diez meses.
El entrenador alcoyanista, Andrés Palop, cuenta con la única baja del sancionado Álex Rubio, a quien el Comité de Competición le impuso la mínima sanción pese a ser expulsado con roja directa por escupir a un jugador del Llosetense, que previamente le había agredido.
Palop, por el contrario, recupera a Marc Martínez y a Víctor Mongil con respecto a la jornada anterior. Todo apunta a que el primero recuperará la titularidad bajo palos. El técnico de L'Alcúdia podría repetir el resto del equipo, aunque mantendrá la incógnita hasta el último instante.
El exportero apuntó que «somos un equipo competitivo y capaz de ganar a cualquiera. Derrotar al líder nos daría un plus para avisar a los demás y darnos cuenta de que compitiendo a nuestro nivel podemos hacer cosas interesantes», dijo el técnico del Alcoyano que, por otro lado, añadió que «queremos demostrar a nuestra afición que somos un equipo fuerte», concluyó Palop.
El Villarreal B, por su parte, visita el campo de El Collao con las bajas por lesión de Felipe Alfonso y del centrocampista Anton Shvets.
Respecto a la apuesta inicial de Paco López, exentrenador del Alcoyano, la lógica indica que mantendrá el bloque que le ha proporcionado doce puntos en las cuatro primeras jornadas.
La única duda estriba en saber quién será el acompañante de Carlos Martínez en la punta del ataque puesto que López alterna entre Fran Sol y el uruguayo Franco Acosta. El primero abrió la pasada temporada el camino de la goleada en El Collao.
