La ilicitana Silvia Soler-Espinosa, número 74 del mundo, cayó hoy en segunda ronda de Wimbledon ante la puertorriqueña Mónica Puig por 6-2, 5-7 y 6-4 en 2 horas y 9 minutos.

Soler-Espinosa, de 25 años, fue la segunda víctima de la puertorriqueña, número 65 del mundo, que en primera ronda eliminó a la quinta cabeza de serie del torneo, la italiana Sara Errani.

"Creo que ha sido un poco de mala suerte aunque no voy a decir que he perdido por mala suerte. El partido se ha decidido en muy pocos puntos", señaló la jugadora ilicitana a Efe después del encuentro.

Sin poder aprovechar una bola de "break" en el primer set, Soler-Espinosa sufrió la efectividad de Puig, de 19 años, que sí alcanzó a romper el servicio de su rival en dos ocasiones para zanjar el parcial en media hora.

La puertorriqueña salió a la pista "con una idea muy clara del partido", según la española, convencida de que podría haberse clasificado para la tercera ronda. "Yo también sabía que tenía que jugar agresiva pero quizá me ha costado un poco", lamentó.

"Me ha roto muy rápido y creo que (Puig) ahí se ha crecido un poco y ha jugado más suelta. Y cuando cedes un poco en este tipo de pista es más difícil recuperarlo", agregó Soler-Espinosa.

Totalmente distinto fue el segundo set, que duró el doble debido a la igualdad que se mantuvo entre ambas rivales, aunque fue Soler-Espinosa la que se llevó la manga tras romper el servicio de la puertorriqueña en el duodécimo juego.

La entrega de la española no tuvo su recompensa en el tercer y último set, en el que se impuso la puertorriqueña, que en la siguiente ronda se enfrentará a la vencedora del duelo entre la tenista ucraniana Lesia Tsurenko y la checa Eva Birnerova.

Soler-Espinosa venía de derrotar en primera ronda a la japonesa Doi Misaki, número 94 del mundo, por 1-6, 6-4 y 6-1 en una hora y 41 minutos.