El Assignia Manresa firmó un partido de ensueño y dominó de principio a fin a un Unicaja descolocado, cansado y flojo en el tiro (86-68), con lo que el equipo catalán cerró la primera vuelta con 8 victorias y 9 derrotas que le permiten seguir con los dedos cruzados para entrar en la Copa.

El Assignia disputó una primera parte impecable. Los locales jugaron con ritmo y bien coordinados. Defendían bien y estaban finos en ataque, el juego soñado de cualquiera. El 5/7 en triples era el mejor indicativo del estado de forma del Manresa, que arrolló a un Unicaja descentrado en el tiro.

Cuatro triples iniciales del Assignia establecían un primer parcial de 16-8 (min.5) con el que Chus Mateo se veía obligado a pedir el primer tiempo muerto.

Entró Garbajosa y la clavó de tres, Fitch también anotaba y acercaba al Unicaja (16-15, min. 7). Pero el banquillo del equipo catalán también trabaja bien, como demostró Achara con 5 puntos consecutivos (21-15, min. 8).

Sinanovic veía una falta en ataque y Chus Mateo se llevaba una técnica por protestar. El Manresa aprovechó la oportunidad, de manera que seguía sumando (27-17, min.10).

En el segundo cuarto, el Unicaja se volvía a acercar con puntos de Garbajosa y Valters, pero una jugada de 2+1 de Doellman volvía a marcar la diferencia (30-23, min.12).

La buena defensa local continuaba dando oportunidades al ataque del Manresa, mientras que el Unicaja insistía con una defensa en zona 2-3 que el Assignia afrontaba con oficio.

Al descanso se llegó con el marcador en 50-37. A la vuelta, la reacción visitante no llegó y el Manresa siguió con su exhibición. Downs, el mejor del Assignia, volvió a anotar de 3 y la ventaja subió a 20 (62-42, min. 26).

En el inicio del último cuarto, los puntos de Asselin y Downs establecían la máxima diferencia del partido, de 23 puntos (70-47, min. 32).

El Assignia bajó la intensidad y el Málaga consiguió un parcial de 0-7 que reducía la ventaja local (70-54, min. 34). Aun así, los locales no tuvieron problemas para mantener el control del partido.