El Nápoles y el Villarreal disputan este martes en el estadio de San Paolo (20.45 hora peninsular, GolT) un duelo que puede enganchar a ambos equipos a la cabeza del grupo A de la Liga de Campeones tras una primera jornada en la que no pudieron obtener los tres puntos.

Los napolitanos buscarán hacer bueno el empate a uno conseguido en Manchester ante el Manchester City y para ello el técnico italiano Mazzarri tendrá que alinear un equipo sin el defensa Campagnaro ni el centrocamista Dzemaili.

Por su parte, Maggio cuenta con más opciones para entrar en el once, donde una vez más el uruguayo Edison Cavani será la principal amenaza en ataque. Los lesionados de larga duración Donadel y Britos continuan con su proceso de recuperación.

El estadio de San Paolo volverá a acoger un partido de la máxima competición europea tras once años, y espera continuar con la racha positiva en esta competición en tierras transalpinas, donde no conoce la derrota. La última participación del equipo fue en el año 1990, y la afición se ha volcado con el regreso a la máxima competición continental. Prueba de ello son las 44.000 entradas vendidas para un aforo máximo de 55.000.

El conjunto amarillo afronta el choque ante el Nápoles como una oportunidad para continuar con las opciones intactas de cara a la clasificación para la siguiente ronda y también espera romper la mala racha en tierras italianas, donde no ha conseguido ganar ningún partido de los siete disputados en competición oficial.

El entrenador amarillo, Juan Carlos Garrido, no podrá contar con el delantero Marco Ruben por la fractura en la falange de su pie izquierdo y viaja con 19 hombres por la duda hasta última hora del delantero italiano Giussepe Rossi, que arrastra molestias por un golpe en la rodilla.

Garrido tampoco podrá alinear a Borja Valero cumple su último partido de sanción tras la reducción de un partido por parte de la UEFA, ni con Ángel, que continua en la recta final de la recuperación de su rotura de ligamentos en la rodilla.