Rafa Nadal aseguró ayer que no está "mermado" físicamente tras la final del US Open ante Novak Djokovic, pero que podría quedarse fuera de los partidos de la eliminatoria de la Copa Davis ante Francia si el capitán Albert Costa ve "a otro mejor" que él.

El jugador balear aterrizó el martes en España tras la final perdida en Nueva York, donde acabó con molestias físicas, y pudo hacer un breve entrenamiento de "sólo media hora" en la pista instalada en la Plaza de Toros de Córdoba.

"Uno tiene que jugar, moverse, forzar, y sólo jugué media hora parada para intentar a adaptarme a la tierra y lo hice con un cansancio encima, que tampoco pude valorar lo que puedo sentir". De todos modos, el número dos del mundo deja la decisión en manos de Costa. "Primero, aquí somos cuatro, y segundo, puede que el capitán vea a otro mejor preparado que yo. Si no estoy bien, por suerte España es una potencia en el mundo el tenis y hay jugadores de máximo nivel", aseveró.

Sin embargo, Nadal se ejercitó ayer a fondo en su primer día de trabajo completo en el Coso de Los Califas, y lo hizo durante tres horas ante su compañero de equipo David Ferrer. El manacorense se quejó en varias ocasiones del bote de la pelota y sobre todo incidió en su golpe de revés.