El tenista español David Ferrer no pudo alcanzar los cuartos de final del Abierto de Estados Unidos tras perder ante el norteamericano Andy Roddick en un accidentado partido, que sufrió tres suspensiones, se jugó en dos pistas y que cayó finalmente de lado del jugador local por 6-3, 6-4, 3-6 y 6-3, tras 2 horas y 39 minutos de juego.

Este partido debía haberse disputado el martes pero fue suspendido a causa de la lluvia. El miércoles sólo se pudieron disputar 15 minutos y el jueves sufrió un nuevo retraso, al tener que suspenderse durante una hora y media por problemas en uno de los fondos de la pista Louis Armstrong, por lo que tuvo que trasladarse a la pista 13.

En el aspecto meramente deportivo, Roddick se tomó cumplida venganza del español, que le derrotó hace unas semanas en Texas en tres sets en la eliminatoria de cuartos de final de la Copa Davis, y exhibió un servicio demoledor que decantó el choque a su favor, por lo que se medirá en cuartos a Rafa Nadal (2).

El partido arrancó con un 3-1 favorable a Roddick y con 4-2 en su segundo reinicio. El 'break' conseguido por el norteamericano el miércoles resultaría finalmente definitivo para la suerte del primer set, ya que ninguno de los dos jugadores daría concesión alguna al servicio a su rival.

Roddick aprovechó la segunda bola de 'break' de la que dispuso en el partido para comenzar de nuevo con ventaja en el segundo set. El norteamericano, que ante Ferrer jugó su partido número 50 en el Abierto de los Estados Unidos, se mostró intratable al servicio a pesar de que el de Jávea es uno de los mejores restadores del circuito.

En el undécimo juego que sirvió Roddick en el partido, por fin disfrutó Ferrer de su primera bola de 'break'. El alicantino no desperdició tan codiciada posibilidad y mantuvo su ventaja para forzar la cuarta manga.

El español disfrutaba de su momento más lúcido y parecía que el partido podía irse al quinto set cuando Ferrer logró su segundo 'break' del partido.

Con 3-2 y su servicio parecía que el quinto jugador del mundo estaba en condiciones de remontar pero el 'contrabreak' del americano en el siguiente juego dio al traste con las opciones de un Ferrer, que anímicamente acusó mucho este golpe y que vio como Roddick se apuntaba los cuatro juegos restantes de forma sucesiva.