Pep Guardiola, entrenador del Barcelona, afirmó ayer, después de que equipo se adjudicase la liga tras empatar ante el Levante (1-1), que el conjunto ha demostrado hegemonía y solidez en los últimos años, con cinco títulos en siete años y once en los últimos veintiuno gracias a un grupo de jugadores "únicos y con una gran fortaleza".

Guardiola, quien ofreció un recuerdo a los fallecidos en el terremoto de Lorca, explicó que, en lo futbolístico, su equipo había hecho tres cuartos de temporada espectacular. "Al final no hemos sido tan brillantes, pero siempre hemos sido competitivos", explicó.

Sobre el partido, afirmó que fueron a buscarlo y que el Levante les esperó. "Al final, es cierto que los dos equipos nos dimos cuenta de que nos servía el resultado", indicó. "Estamos muy satisfechos y pedimos mucho civismo, sobre todo a la gente de Barcelona. Que lo disfruten. Nosotros vamos a hacerlo públicamente y también en la intimidad", señaló.

Guardiola admitió que estaba tranquilo y destacó que había sido importante lograr el título a dos jornadas del final y tras haber competido con un rival muy fuerte como el Real Madrid. Al comparar esta Liga con las dos anteriores, explicó que las tres habían fueron muy parecidas, aunque la actual tuvo la dificultad añadida de ver cómo podía competir el equipo en un año posterior al Mundial en el que estuvieron muchos jugadores del Barcelona. "Hemos dado una lección, tras un año en el que necesitamos 99 puntos para ser campeones", dijo.

Por su parte, el director deportivo del FC Barcelona, Andoni Zubizarreta, ensalzó anoche el trabajo de los ejecutivos que dejaron el Barça la temporada pasada y que pusieron el club en la que cree es una línea ganadora, entre los que destacó al ex secretario técnico, Aitor "Txiki" Begiristain, a quien sustituyó en el cargo.