El Manchester United se ha impuesto con facilidad al Chelsea (2-1) y ha dejado prácticamente sentenciado el título de la 'Premier League' tras la disputa de la trigésimo sexta jornada, en la que el Arsenal desaprovechó la oportunidad de asegurarse la tercera plaza y cayo ante el Stoke City (3-1).

El que será rival del FC Barcelona en la final de la Liga de Campeones, saltó al césped de Old Trafford con la intención de finiquitar el campeonato y se adelantó antes de cumplirse el primer minuto de juego, cuando un pase a la espalda de los centrales del coreano Park fue aprovechado por 'Chicharito' Hernández para abrir el marcador.

Lejos de reaccionar, el Chelsea no encontró el rumbo y vio como el Manchester se hacía con el control del partido, gozaba de las ocasiones de gol y jugaba a placer. Fruto de este dominio llegó el segundo antes del descanso, al rematar Vidic un fenomenal centro del incansable Giggs.

Tras el descanso, los de 'Sir' Alex Ferguson retrocedieron unos metros, en parte porque el resultado les favorecía y en parte porque el Chelsea, ya sin nada que perder, se lanzó al ataque en busca del milagro.

Entraron Ramires y Torres por Obi Mikel y Kalou, lo que dotó de mayor presencia 'blue' en el área de Van der Sar. En el minuto 70, un intento de remate de Torres le cayó en boca de gol a Frank Lampard que acortaba distancias.

A partir de ahí, el encuentro se rompió por completo, con un Chelsea volcado a la desesperada y un Manchester que a la contra pudo golear, pero finalmente el marcador no se movió y los de Ferguson se sitúan a seis puntos a falta de dos encuentros, por lo que logrando un punto la semana que viene en su visita al Blackburn Rovers.

Por su parte, el Arsenal visitaba al Stoke City con el objetivo de asegurarse la tercera plaza, pero no tuvo ninguna opción (3-1) ante unos locales que, tras lograr la permanencia, están en un gran momento de forma.