Miguel Barceló, detenido el pasado jueves por su presunta implicación en una red de suministro de sustancias dopantes, quedó ayer en libertad tras prestar declaración en el juzgado de instrucción número 4 de Alicante aunque con cargos, ya que está acusado de un delito contra la salud pública. El dueño del conocido gimnasio Atenas de Alicante salió del juzgado antes de las 13 horas con semblante serio y acompañado por sus abogados, Manuel Lucas Amorós y Nicolás Díaz.

El culturista alicantino no quiso realizar declaraciones aunque tendrá que volver a declarar próximamente en Madrid en el juzgado que se encarga de la "Operación Galgo" en la que fueron detenidas 14 personas entre las que se encuentra la atleta Marta Domínguez.

Aunque en un principio estaba previsto que prestara declaración hoy, finalmente la realizó en la mañana de ayer asegurando estar libre de toda culpa y negando cualquier implicación en la distribución de sustancias dopantes.

Miguel Barceló fue detenido el pasado jueves por la Guardia Civil sobre las ocho de la mañana para proceder posteriormente al registro de su domicilio y de su gimnasio, ubicado en el barrio de Altozano.

Los agentes encontraron 13 hormonas del crecimiento que el culturista aseguró que eran para consumo personal, ya que continúa compitiendo en campeonatos de culturismo donde es muy conocido por sus éxitos.

Los investigares seguían la pista del alicantino desde el pasado mes de abril por orden del juzgado de instrucción número 24 de Madrid.

En su declaración en Alicante, Barceló negó que conociera al médico Eufemiano Fuentes, uno de los detenidos en la "Operación Galgo" y que anteriormente también estuvo implicado en la "Operación Puerto", aunque sí reconoció haber tenido contactos con el entrenador Manuel Pascua Piqueras, que también pasará a disposición judicial en las próximas horas.

El juez de guardia ha ordenado al culturista alicantino que debe compadecer una vez al mes y notificar su domicilio, aunque se espera que en breve se vea obligado a declarar en Madrid para aclarar la presencia de hormonas del crecimiento en su gimnasio y si realmente era dedicadas al consumo personal.

El juzgado de Instrucción número 24 de Madrid, que instruye la "Operación Galgo", tiene previsto tomar declaración a partir de hoy al resto de los detenidos por la Guardia Civil en Madrid implicados en una red de dopaje en el deporte. Los presuntos responsables se enfrentan a un delito contra la salud pública en relación a sustancias dopantes, recogido en el artículo 361 bis del Código Penal. El juez ha decretado el secreto del sumario.

En el curso de los próximos días, el juzgado recibirá la información recabada por los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en las entradas y registros practicados en las últimas horas, así como las declaraciones de los detenidos en los partidos judiciales donde prestarán declaración.

Agentes de la Guardia Civil arrestaron en cinco provincias españolas a un total de catorce personas por su presunta implicación en la citada trama, entre ellas la atleta palentina Marta Domínguez, así como médicos deportivos, farmacéuticos, entrenadores y representantes y deportistas de élite. En el marco de esta operación, que se ha desarrollado en Madrid, Las Palmas, Alicante, Segovia y Palencia, se han efectuado además un total de 15 registros domiciliarios en los que se ha intervenido anabolizantes, esteroides, bolsas con sangre, así como material de laboratorio utilizado para la realización de transfusiones sanguíneas.