El sorteo de la Copa del Rey ha sido recibido como un auténtico regalo para el Benidorm CF, ya que se enfrentará al Orihuela en la primera eliminatoria en el Municipal Guillermo Amor y caso de superarla, quedará exento en la segunda. Esta circunstancia es todo un alivio para un mes de septiembre en el que se disputan cinco partidos de liga.

Ayer, tanto el secretario técnico Felipe Ferrándiz, como el técnico Roberto Granero valoraban esta circunstancia. Felipe afirmaba que "jugar dos eliminatorias de Copa en apenas una semana, al comienzo de la competición, tras la pretemporada es bastante duro, por lo que el hecho de quedar exentos en la segunda eliminatoria es un alivio. Creo que tanto para el Benidorm, al que le ha tocado jugar en casa, como para el Orihuela, que tendrá un desplazamiento corto, es una suerte y además el que gane, se libra de la siguiente ronda, por lo que es para estar contentos y satisfechos".

El técnico Roberto Granero añadía que "cualquier rival sería difícil. Hemos tenido la fortuna de jugar en casa y además librarnos de la segunda eliminatoria en una semana".