El británico Mark Cavendish, del Columbia, sumó la cuarta victoria al sprint en la presente edición del Tour al imponerse con autoridad en la decimoctava etapa disputada entre Salies de Béarn y Burdeos, 198 kilómetros, en la que Alberto Contador salvó el día vestido de amarillo, en espera de ratificar su tercer Tour en la contrarreloj del sábado.

Cavendish fue superior en un sprint largo y desordenado, junto al río Garona, que cruza la ciudad bordolesa, en el que menos dependiente que otras veces de su equipo tuvo tiempo para girarse en sus bicicleta para mirar a sus rivales y realizar el rito el ritual del triunfo, del que hizo el número 14 en el Tour de Francia.

El ciclista de la Isla de Man, quien tiene al ex esprinter alemán Erik Zabel como entrenador, no dio opción al neozelandés Julian Dean (Garmin) y al italiano Alessandro Petacchi (Lampre), segundo y tercero en meta, todos con un tiempo de 4h.37.09, en una jornada tranquila para los favoritos, que ya velan armas para la contrarreloj que fijará los puestos definitivos de la general.

El tránsito de los pinos pirenaicos a los viñedos de la región aquitana recuperó el buen tiempo y trajo la tranquilidad al pelotón, sobre todo a los favoritos, que se borraron de la primera página para dar paso a los esprinters, los sufridores en las etapas de montaña.

Alberto Contador (Astana) conservó sin problemas el maillot amarillo y guardó los 8 segundos de ventaja sobre Andy Schleck (Saxo Bank). Los dos se van a jugar el Tour contrarreloj, con las apuestas volcadas a favor del madrileño, a quien, después de recoger en el podio la prenda dorada, le presentaron a Cameron Díaz, la actriz estadounidense de "Los ángeles de Charlie" y "Algo pasa con Mary". El chico, "encantado" de conocer a tan estupenda actriz. También le estrechó la mano otro monstruo del cine, como Tom Cruise: "Misión imposible", entre otras películas.

Uno de los beneficiados de la jornada fue Alessandro Petacchi Lampre), quien recuperó el maillot verde de la regularidad que vestía en la salida el noruego del Cervélo Thor Hushovd. El italiano vive una segunda juventud y luchará hasta París para quedarse con la prenda verde esperanza.