La selección española de fútbol afronta este domingo el partido más importante en sus noventa años de historia, la final del Mundial de Sudáfrica que afronta como favorita por su vigente trono europeo, por la incuestionable calidad de sus jugadores, por su estilo de toque mundialmente alabado y por el empuje de más de 46 millones de españoles que sueñan con el único gran triunfo deportivo que aún se le resiste al país.

La selección española ha tomado contacto en la tarde-noche del sábado con el Soccer City de Johannesburgo, el campo donde disputará el domingo la final del Mundial Sudáfrica 2010 ante Holanda, en una sesión en la que Vicente del Bosque escondió sus cartas en la parte abierta a los medios de comunicación.

Mientras que Holanda, que se entrenó con anterioridad a puerta abierta (al contrario que estos días pasados), España permitió luz y taquígrafos los primeros quince minutos, como ha sido norma durante todo el Mundial.

En esa fase inicial del trabajo poco o nada se pudo vislumbrar, por cuanto tras los correspondientes ejercicios físicos, mezcló a toda la plantilla sin que se pudiera ver el posible 'once' inicial o comprobar cuál será el undécimo jugador, ya que diez parecen fijos.

En la semifinal Pedro Rodríguez tuvo una irrupción espectacular y cuajó un gran encuentro. Fernando Torres, que había sido titular durante cuatro partidos seguidos, se tuvo que conformar con disputar los nueve minutos finales. La otra opción que se baraja es el regreso al once de David Silva, que no es de la partida desde el choque ante Suiza.

Raúl Albiol, lesionado desde hace dos semanas en los peroneos de la pierna derecha desde el día 26, comenzó a trabajar con el resto de compañeros sin problema aparente. El seleccionador español, Vicente Del Bosque, señaló, en la rueda de prensa oficial en la víspera de la gran final del Mundial de fútbol de Sudáfrica que enfrentará a España y Holanda, que "es un partido fácil de preparar" ya que "no hace falta motivar a los jugadores".

Sobre qué equipo iba a tener más presión, Holanda, por haber jugado antes dos finales sin haber ganado ninguna, o España, por partir como favorita, Del Bosque afirmó que son "dos países que tratarán de ganar el mundial" y que no había "mas presión para uno que para otro" ya que cada uno intentaría ser el mejor. "El favoritismo hay que demostrarlo en el campo", aseguró.

Ante el cambio que se pudo observar en el juego de Alemania en las semifinales, el técnico español fue preguntado sobre si esperaba lo mismo de Holanda. "No, no van a cambiar su forma de jugar, tienen un estilo definido y no creo que haya un cambio de guión en lo que piensan hacer", declaró.

"Tenemos una plantilla con muchas posibilidades y distintas soluciones para lo que se plantee: jugadores rápidos, de banda y jugadores que no hemos podido usar más", explicó el salmantino sobre si España se podría adaptar al estilo de juego del rival.

"Antes del partido todo son cábalas pero los dos equipos tienen su guión escrito y no creo que cambie, pero habrá que valorar detalles", reiteró al opinar sobre si el juego abierto de Holanda iba a favorecer el juego español. "Tiene jugadores rápidos, de calidad, verticales, no creo que especulen aunque lo pueden hacer, pero son muy verticales", afirmó.

Sobre sus sensaciones antes de un partido tan importante, Del Bosque afirmó que "de momento" está "muy tranquilo". "No creo que me altere hasta la hora del partido y además tengo mucha confianza en los jugadores", concluyó.