Carles Puyol, autor del tanto de la victoria de España sobre Alemania en la semifinal, indicó que no cree que pase a los libros de historia por su diana porque confió que "el domingo (en la final ante Holanda) haya otro gol más importante que este". "He marcado pocos goles. Es verdad que es un gol muy importante. Estoy muy contento, y sobre todo feliz porque el equipo está donde se merece, que es en la final", comentó ayer. "Sabíamos que el partido era muy importante para todos, para el fútbol español. Estamos donde nos merecemos. Ahora nos falta el último paso. Estamos con muchas ganas y muchísima ilusión", dijo.

Puyol señaló, sobre los momentos posteriores al gol, que "hay que vivirlos", y más para un jugador como él que no está acostumbrado a anotar en partidos de tanta trascendencia, "pero todo es muy rápido y lo que quieres es centrarte, porque eres consciente de que queda mucho partido, mi trabajo es defensivo y si se mantenía portería a cero se entraba en la final". El barcelonista explicó que antes del partido habían hablado de hacer esta jugada, como ocurre en su equipo. "Lo intentamos en la primera parte, pero no salió bien. En la media parte volví a insistir a Xavi que la pusiese ahí y todo fue perfecto", indicó Puyol.

Opinó que el ex madridista Wesley Sneijder "es uno de los mejores" de Holanda, muy importante para su fútbol porque "el juego ofensivo pasa por él, está marcando goles, dando asistencias, un jugador muy peligrosos", añadió.

Explicó que España en el Mundial "empezó con un mal resultado, no jugando mal, pero sí que es verdad que el primer resultado fue duro para todos". "Luego hemos ido pasando pruebas, cada vez el equipo ha tenido más confianza y el último partido ha sido muy bueno. Espero que aún nos quede el mejor", apuntó Puyol, que pese a la buena imagen dada en la semifinal y a la evolución no cree que haya favoritismo. "Una final siempre está al cincuenta por ciento. Hemos vivido esto desde el inicio del Mundial, que mucha gente nos daba como favoritos, perdimos el primer partido y parecía éramos un desastre. Nosotros vamos a lo nuestro, conscientes de que estamos ante una oportunidad única", comentó.

Cuestionado por su continuidad en la selección tras Sudáfrica, destacó que "lo que queda por delante es muy bonito y después habrá tiempo para valorar estas cosas", dijo.

"Un reto" para el rival

El seleccionador holandés, Bert van Marwijk, declaró ayer que afronta la final del Mundial "sin mirar a las estadísticas históricas" pues recuerda que, si el equipo ibérico no ha ganado ninguna final, ellos tampoco, pese a que han jugado dos. "No miro las estadísticas históricas. España no sabe lo que es ganar una final, nosotros tampoco", afirmó el técnico, que no quiso hablar de revancha contra la historia. Para Van Marwijk, España "mereció vencer a Alemania" pero piensa que no tienen motivos para temer al equipo de Vicente del Bosque. "Me gusta la forma en que jugaron (los españoles). Nosotros haremos nuestro propio juego contra ellos. Les respetamos, pero no les tememos". "Va a ser un reto para nosotros. A los alemanes apenas les dejaron jugar", añadió el técnico holandés.