El combinado nacional, vigente campeón de la competición, se enfrenta a Francia en tierras galas.

Optimista, pero cauto a la vez. David Ferrer se mostró ayer convencido de que España superará los cuartos de final de la Copa Davis, destacó la calidad de Francia y ensalzó la importancia de la competición. "La Davis cambia, siempre es especial, juegas para todo un país y es diferente. Ya no juegas por ti mismo, juegas para tu equipo y para tu gente", manifestó.

Ferrer, uno de los jugadores que presenta mejor balance en esta competición, con 10 victorias y sólo 3 derrotas, aseguró que se encuentra "bien físicamente", aunque mostró sus reticencias sobre la pista dura que han designado los franceses para esta serie. El alicantino consideró que la pista es una de las más rápidas en las que ha jugado, si bien dijo que cada sesión de entrenamiento que pasa le sirve para adaptarse al terreno.

Para Ferrer, la eliminatoria será "complicada" porque la disputan fuera de casa, algo que no pasaba desde la final ganada en Argentina en 2008. "Todos son grandes jugadores", precisó sobre el conjunto francés, que estará compuesto por Michael Llodra, Julien Benneteau -de los que apuntó que además del doble podrían participar en un individual- Gaël Monfils y Gilles Simon o Jérémy Chardy.

Sobre el reto de conseguir la tercera Ensaladera consecutiva, Ferrer consideró que todavía "queda mucho" y que deben centrarse en esta eliminatoria para poder acceder en semifinales, donde les esperarían Rusia o Argentina.

El alicantino viene de hacer un buen papel en Wimbledon, donde cayó contra Robin Soderling en octavos de final, en un partido que se alargó hasta los cinco sets: "Físicamente estoy bien. El hecho de ganar partidos te da confianza, pero sí que es cierto que cada vez estás un poco más cansado. No obstante, ahora estamos a mitad de temporada y me encuentro bastante bien".

El tenista de Xàbia se marcó como objetivo para el 2010 finalizar entre los 10 primeros del ránking mundial -ahora está en el número 12-, algo que ve "factible". Además señaló que tratará de jugar bien en Hamburgo sobre tierra para tomar confianza para la gira americana, donde aspira a enganchar una serie de resultados positivos que le sirvan para sumar puntos y llegar al "Top Ten" de la ATP: "Estamos en el camino para poder acabar entre los quince primeros. El "Top Ten", ahora tal y cómo va la cosa sí, pero queda mucho y va ser muy difícil".