Quizá ayer los feroces tabloides ingleses no hubieran despotricado ni contra Fabio Capello, del que pidieron su cabeza en bandeja de plata, ni contra sus muchachos. Quizá hoy, el espigado Frank Lampard hubiera sido coronado como el líder de la reacción inglesa ante el ciclón alemán. Quizá hoy el mundo entero no se estaría preguntando a qué se debe esa involución declarada y aceptada por la FIFA al desechar la ayuda de las nuevas tecnologías.

Un malagueño, Francisco Ortiz Delgado, podría haber variado el rumbo del encuentro. Funcionario jubilado, amigo de los inventos futbolísticos, propuso hace justo siete años una leve modificación en el terreno de juego que hubiera evitado la situación caótica vivida en Bloemfontain. Pero la FIFA, como en otros tantos casos, miró para otro lado.

La propuesta presentada por Ortiz Delgado es tan sencilla que asombra la negativa del organismo que vela por los intereses del fútbol. No habría que parar el juego para consultar ningún vídeo ni reclamar la atención del cuarto árbitro. La Física es la clave de esta simple operación. Y es que bastaría con inclinar apenas diez grados la zona que comprende la línea de puerta hacia las redes de la portería para que el balón no engañara.

"La portería debe tener un plano inclinado hacia abajo detrás de la raya para evitar los 'goles fantasmas', como sucedió en el partido entre Alemania e Inglaterra", comentó ayer el malagueño.

Koke Contreras lo probó

El prototipo se construyó y probó con éxito hace ya más de un lustro en varias pruebas efectuadas en La Rosaleda. Y el inventó funcionó a las mil maravillas. Gracias a esa leve y casi imperceptible inclinación del suelo, el balón, aunque lleve el efecto contrario, se quedará dentro de la portería si es que ha botado totalmente por detrás de la línea. El ex cancerbero madrileño del Málaga, Koke Contreras, -mundialista en Corea-Japón - fue el maestro de ceremonias. "Los jardineros inclinaron el terreno 10 grados y la prueba fue perfecta"."La FIFA contestó que lo pasaban al departamento técnico y a día de hoy siguen sin decidirse".