Alemania demostró su condición de favorita absoluta para ganar el Mundial después de vencer a su adversario histórico, Inglaterra, en Bloemfontein (4-1). Dos goles de Thomas Müller, el joven centrocampista del Bayern, uno de Klose y otro de Podolski desarbolaron a Inglaterra, una selección que siempre fue inferior. Con el 2-1, Inglaterra vio como no le era concedido un gol legal de Frank Lampard, cuyo disparo había rabasado la línea después de golpear en el larguero. Pero es indiferente, porque Alemania fue un equipo mucho más incisivo y concentrado que su rival. Alemania se medirá en cuartos al ganador del Argentina-México.

Ofensiva a ultranza, derroche físico sin brusquedades (sólo una tarjeta por bando), goles abundantes, alternativas en los dos frentes, cantadas de los porteros, disparos a la madera y, por si fuera poco, un gol de los llamados "fantasmas" salpimentaron un espectáculo apasionante, digno de una final, en Bloemfontain.

Alemania arrancó con un aplomo impropio de su juventud y tuvo una primera ocasión temprana. Ozil (m.5) recibió un pase perpendicular, ganó la posición a su marcador pero no controló del todo. Su disparo de refilón fue despejado por James. El susto serenó los ánimos ingleses. Los hombres de Fabio Capello decidieron tomárselo con más calma,

Sin embargo, en el minuto 23, Alemania marcó el gol más simple del fútbol. El meta Neuer lanzó la bola a tres cuartos del campo, Klose ganó el forcejeo a Upson y, a media caída dentro del área, alargó la pierna derecha para batir a James en su salida. Su duodécimo tanto en un Mundial le iguala con el mítico Pelé.

El partido se volvió loco. Los dos equipos abandonaron sus precauciones defensivas y entraron en un cuerpo a cuerpo en el que los ingleses llevaron la peor parte. En el m.30 Klose falló solo ante el portero, a continuación Defoe cabeceó al larguero -en fuera de juego- y en el 32 Podolski, entrando sin marcaje desde la izquierda, recogió un balón de Müller y batió por bajo a James.

Parecía sentenciado, pero el encuentro enloqueció todavía más. En el m.37. Gerrard centró al punto de penalti y Upson ganó a los centrales alemanes para batir a Neuer, que salió a destiempo. Un minuto después el equipo arbitral le negó el empate a Inglaterra. El balón, lanzado por Lampard contra el larguero, botó medio metro dentro de la puerta alemana, volvió al travesaño y ya en el segundo bote no rebasó la raya.

Alemania recibía una lejana compensación por el gol fantasma que, 44 años antes, el inglés Geoff Hurst le marcó en la prórroga de la final de 1966, cuando Inglaterra ganó en Wembley su único título. La primera parte, al cabo de una lucha sin tregua, pudo acabar con un marcador de escándalo, pero los equipos se fueron al descanso con el 2-1 para Alemania.

El larguero volvió a cruzarse en la trayectoria de un balón botado en libre directo por Lampard en el m.52. Milner disparó al cuerpo de Neuer en el 61. Inglaterra se embarcó en una audaz ofensiva. Arriesgó y perdió. Schweinsteiger condujo un contragolpe sirvió a Müller, desmarcado, que fusiló a James en el 70. La retaguardia inglesa de desmoronó y los ataques germanos llegaban en oleadas ante James. Müller hizo su segundo gol en tres minutos y, ahora sí, con 4-1, el partido quedó visto para sentencia, pese a que Gerrard y Lampard aún pujaron por recortar la diferencia.

Alemania; Manuel Neuer; Philipp Lahm, Arne Friedrich, Per Mertesacker, Jerome Boateng; Sami Khedira, Bastian Schweinsteiger, Thomas Müller (Piotr Trochowski, m.72); Mesut Ozil (Stefan Kiessling, m.83; Lukas Podolski, Miroslav Klose (Mario Gómez, m.72).

Inglaterra: David James; Glenn Johnson, Matt Upson, John Terry, Ashley Cole; James Milner (Joe Cole, m.63), Steven Gerrard, Frank Lampard, Gareth Barry; Wayne Rooney y Jermain Defoe (Emile Heskey, m.72).

Goles: 1-0, m.20: Klose. 2-0, m.32: Podolski. 2-1, m.37: Upson. 3-1, m.67: Müller. 4-1, m.70: Müller.

Árbitro: Jorge Larrionda (Uruguay). Tarjetas amarillas a Friedrich, por Alemania, y a Johnson por Inglaterra.

Incidencias: partido de octavos de final disputado en el estadio Free State de Bloemfontain. Lleno. 40.911 espectadores.