La Casa-Museo Modernista de Novelda es el escenario elegido por el realizador alicantino Luis Soravilla para levantar su próxima película, un largometraje titulado El propósito de la intención, que ha empezado ya a rodar con los actores Tomás Mestre, Elena Candela, Fele Pastor y Paco Escribano en este edificio histórico de 1903, perteneciente a la Fundación Caja Mediterráneo.
El cineasta nominado en 2010 a los Goya con su cortometraje Adiós, papá, vuelve al cine después de cuatro años de ausencia tras Las aventuras de Moriana (2015) y reconoce que «tenía ya muchas ganas». Lo hace con «un thriller dramático de humor surrealista», según sus palabras, con un guion creado por Soravilla a partir de un encierro en un ascensor en el que han aportado ideas tanto Mestre como Pastor o María María José Alcaraz, productora con Diego Belmonte de la cinta.
La historia es la de un hombre locamente enamorado de una vecina de su edificio, que hace todo tipo de peripecias para generar encuentros fortuitos debidamente organizados. Un día coinciden en el ascensor, que inesperadamente se bloquea entre dos pisos. Por diferentes motivos, pasarán 20 días encerrados juntos. Su conexión con el mundo son el portero y Don Benito, las dos únicas personas que habitan en ese momento el edifico un 3 de agosto.
El edificio de viviendas no es otro que la Casa-Museo Modernista, y el ascensor -que no existe en la realidad- ha sido construido artificialmente por la directora de arte, Begoña Movellán, para colocarlo en el hueco de las escaleras de este edificio.
«Al escribir el guion pensaba que tenía que haber algo, algún escenario surrealista que encajara con los personajes. En la arquitectura modernista, si bajas la luz la imagen es lúgubre, y si la subes es de un colorido impresionante. Necesitábamos un ambiente fuera de lo normal para la historia y la Casa Modernista es una joya increíble ubicada», explica sobre la elección de este inmueble Soravilla, quien accidentalmente acabó un día en el Ayuntamiento de Novelda buscando una localización «y cuál fue mi sorpresa cuando empezaron a abrirse puertas y decenas de oportunidades para rodar allí», por lo que agradece la colaboración de la Fundación Caja Mediterráneo para rodar tres semanas en distintos espacios de la casa-museo, y del Ayuntamiento de Novelda, ya que también prevé situar escenas en otros siete rincones de la localidad.
«Esto me ha llevado no solo a rodar allí sino a poner Novelda con mayúsculas en la historia, ya que las instituciones han buscado todas las soluciones a los problemas clásicos de un rodaje», agrega el cineasta, que confía en acabar el proyecto de filmación en el mes de agosto.
Previamente, y como consecuencia del confinamiento por el estado de alarma ante la crisis del coronavirus, el equipo se pasó dos meses de lectura de guion ensayando por videoconferencia a través de Zoom y solo en la recta final realizaron lecturas presenciales.
Lo de rodar manteniendo las distancias de seguridad «es complicado porque en el set no puede haber más de veinte personas, solo entran los que van a rodar y los mecánicos. La suerte es que los protagonistas -que permanecen un tiempo encerrados en el ascensor-, Elena y Tomás, son pareja en la vida real. Si no, no podríamos», indica el director de El propósito de la intención, cuyo fondo, aclara, es «más filosófico» de lo que parece porque «habla de alguien que quiere cambiar pero el instinto se lo pone difícil».
Al elenco se suma también Enrique Villén y Damián Varea y la música de la película corre a cargo de Adán Rodríguez
Joya del patrimonio
Para la Fundación Caja Mediterráneo es «un placer» acoger el rodaje en la Casa-Museo Modernista de Novelda. «Es, sin duda, una manera novedosa y muy interesante de dar a conocer una de las joyas de nuestro patrimonio», asegura Luis Boyer, presidente de la entidad que desde 1980 desarrolla labores de restauración y mantenimiento en esta referencias del Modernismo en la provincia. «Estamos muy satisfechos de que Luis Soravilla nos ayude a poner en valor este magnífico edificio a través de su nueva película».
