Recién iniciada la tercera edición del M Festival, dedicado al pop rock alicantino, y con los ecos de las últimas actuaciones de su festival de flamenco todavía resonando entre los aficionados, la Fundación Caja Mediterráneo se lanza a una nueva aventura musical, con el apoyo de Aguas de Alicante, que ha bautizado como Sonidos Globales y que reunirá a tres figuras internacionales de África, Oriente Próximo y América del Norte.
El ciclo Sonidos Globales viene a cubrir un espacio huérfano en la programación musical de Alicante, que no es otra que la de la denominada world music y sus diferente expresiones.
El objetivo del ciclo es ofrecer en el Aula de cultura de la Fundación Caja Mediterráneo a las figuras más relevantes de géneros que no se encuadran dentro de la música pop occidental, pero también la hibridación de estos en otros contextos.
Este nuevo ciclo se desarrollará los días 29 de febrero (sábado), 24 abril (viernes) y 8 de mayo (viernes). El objetivo de Sonidos Globales es aunar tradición y modernidad, manteniendo la atención sobre las nuevas expresiones que surjan desde cualquier punto del mundo.
«El mundo es diverso de facto, y así como sus sonidos y los puntos geográficos desde los que se producen», afirman desde la organización. «Para este primer ciclo hemos seleccionado tres artistas de renombre internacional, y que creemos aúnan el espíritu abierto que guía este ciclo de conciertos. que actuaran por primera vez en Alicante», agregan.
El ciclo se iniciara con el concierto de Asmaa Hamazaoui & Bnat Timbouktou el sábado 29 de febrero. Es una joven marroquí que ya ha actuado en eventos tan prestigiosos como Womad, Oslo World Music o centros como la opera de Lyon o el Museo Reina Sofia de Madrid. Asmaa Hamzaoui nació en Casablanca, tiene 25 años, y los que saben dicen que es la primera mujer en tocar profesionalmente el guembri, instrumento emblemático del folklore magrebi.
Le seguirá el 24 de abril Omar Souleymnan, el cantante sirio más internacional, autor de canciones como Werni Werni y Wenu Wenu, que se han convertido en fenómenos globales y ha llegado incluso a remezclar la islandesa Björk. Su sonido es una aleación de melodías orientales, psicodélia, ritmos de baile, sintetizadores y poesía en árabe y en kurdo. Una formula que le ha transformado en una estrella internacional.
Su historia, antes de llamar la atención en Occidente o actuar en la gala de los premios Nobel, está cimentada en infinidad de cassettes que eran un fenómeno en Siria. Su síntesis de tradición y modernidad destilada con sintetizadores y letras de poetas sirios actuales fue la banda sonora de muchas bodas en Jordania, Siria, Chipre, Palestina o Líbano antes de actuar en festivales como Womad, Sonar o Glastonbury.
Omar Souleymnan presentará su nuevo álbum Shlon (Mad Descent, 2019) en el Aula de cultura de la Fundación Caja Mediterráneo Alicante dentro del ciclo Sonidos Globales.
El ADN del soul
Lee Fields & The Expressions es el nombre clásico del ciclo y actuará el 8 de mayo. Superviviente de la cadena de montaje del soul, ese sonido destilado por la experiencia afroamericana en las grandes ciudades como Detroit o Memphis, las dos ciudades donde se manufacturo el mejor soul.
Lee Fields es el ADN del soul y desde su debut en 1979 hasta la actualidad ha pasado por todos los estados anímicos y populares de alguien que sabe que la inspiración solo llega a través de la transpiración: «Derrota, desesperación y aislamiento como consecuencia de que nunca renuncio a hacer las cosas de una forma, la correcta», afirma.
El último soulman original en pie. Fields porta la llama que va del Sam Cooke que abarrotaba Harlem Square a Marvin Gaye y Otis Redding, orgulloso legado que transmiten sus canciones, la eternidad concentrada en tres minutos y rematada con una sincopa. «Fields es la vieja escuela, esa que no defrauda, que esta ahí y será siempre absolutamente moderna. It Rains Love (Big Crown 2019) lo muestra imperturbable en su misión; emocionar y hacer bailar. La de Fields es una carrera de fondo y que llega en un momento adecuado.
