El Diluvi, uno de los triunfadores en los recientes Premios Carles Santos de la música valenciana -se alzó con el mejor disco de fusión y mestizaje por Junteu-vos y mejor canción por Heroïnes de la fosca nit- se encargará de inaugurar la tercera edición del M Festival de Rock Mediterráneo, promovido por la Fundación Caja Mediterráneo y la Diputación de Alicante. Aunque en breve se presentará el cartel completo, elaborado por Alejandro Tévar y Miguel Carratalá, la primera cita de este encuentro musical de bandas locales y nacionales será el 31 de enero en el Aula de Cultura de Alicante con El Diluvi y Nomembers. Las entradas para este concierto (5 euros) ya están disponibles en Entradas a tu alcance.

El Diluvi, que se define como grupo de mestizaje mediterráneo de L'Alcoià, tiene la agenda repleta hasta enero de 2021. El grupo, que comenzó versionando al alcoyano Ovidi Montllor, a quien nunca olvidan, celebrará los primeros minutos de 2020 sobre el escenario en el Festivern (Tavernes de la Valldigna) dejando atrás un año del que no tienen queja: «Con que 2020 nos vaya igual, ya podemos estar satisfechos. Estamos muy, muy contentos», apunta Flora Sempere, una de las voces cantantes junto a David Payà, Andreu L'Arreu, Txus Rodríguez, Lluc Llorens, Dani García y Jordi Bernabeu, que se manejan con las bandurrias, violines o guitarrones pero también con la batería, el bajo o la guitarra eléctrica.

Flora explica que el origen del grupo se remonta a 2011, cuando «unos amigos del Casal Tio Cuc d'Alacant nos pidieron tocar algo allí y nos preparamos seis temas de Ovidi, cantautor al que valoramos mucho y que estaba un poco olvidado aquí. A la gente le gustó y a partir de ahí nos llamaron para más conciertos y dijimos: ''Ostras, tenemos que preparar un repertorio y ponernos nombre'', que no teníamos porque tampoco teníamos idea de seguir».

Una canción de Ovidi compleja de versionar la utilizaron para dar nombre al grupo, al que pocos meses después le picó «el gusanillo» de crear sus canciones y de cinco pasaron a siete miembros. «Seguíamos con versiones de Ovidi, pero a los dos años de rodar empezamos a hacer nuestros temas, a grabar discos, poco a poco la cosa se fue haciendo grande y parece que funciona», destaca la cantante, que también toca la bandurria y que matiza que en los dos últimos años «el volumen de conciertos ha crecido mucho y nos ha sobrevenido un poco. Aún no nos da para vivir al completo de esto, pero estamos cada vez más cerca de ese momento. Y está siendo un proceso muy bonito, siete personas trabajando codo con codo». Siete y cada uno en un sitio, desde Alcoy a Zaragoza, pero con base en Castalla, «donde está nuestro local de ensayo y tenemos todo».

Junteu-vos (2019) es su tercer disco largo después de Ànima (2017) y Alegria (2015). No olvidan su tradición musical, pero con los ojos abiertos: «Solo con los instrumentos que llevamos, sin querer, sonamos a música tradicional valenciana, pero nuestra idea siempre ha sido transformar esta música de raíz, evolucionar y llevarla un paso más allá, transformarla para llegar a más gente».

Si sus anteriores trabajos sonaban festivos, en el último «hemos intentado buscar sonidos que nos resultaban más lejanos, nos hemos puesto a prueba. Utilizamos elementos de electrónica, más guitarra eléctrica, que nos han hecho salir de nuestra zona de confort, y ha merecido la pena». Junteu-vos nace de esa necesidad de unirse «porque la sociedad cada vez lo reclama más, se ve en el feminismo o ante la incertidumbre social y política que hay. Es que no queda otra», apunta Flora.

¿Es importante tener una posición ideológica en la música? ( Heroïnes de fosca nit comienza con una introducción de Anna Gabriel, exdiputada de la CUP). «Es que, si no, ¿de qué cantas? Es muy importante tener en las venas sangre y no horchata. Y ser sincero en el mensaje que transmites».