Que la historia y la cultura rompen fronteras se ha convertido en una de las máximas del Museo Arqueológico de Alicante. Sobre todo durante la preparación de la exposición Alicante. Tesoros del MARQ, que viajará al Museo Nacional de Teherán del 22 de septiembre al 8 de abril, y que convertirá a este centro en el primer museo español en mostrar sus fondos en Irán. Un hecho histórico al que se une la condición de ser también la primera muestra internacional del MARQ.

Superadas gestiones diplomáticas, papeleos y permisos, algo que no ha sido fácil, el museo alicantino ha conseguido que la historia de Alicante viaje hasta la antigua Persia y con ella una visión de la historia de España, en un momento crucial para ese país, sometido al bloqueo de transacciones económicos a nivel internacional.

Un total de 283 piezas del museo alicantino están ya preparadas para viajar a Teherán en los próximos días, junto a las procedentes del Museo Nacional de Irán que hasta el domingo se exhiben en el MARQ. Esta exposición, que cuenta con un presupuesto de 125.000 euros, es «una contraprestación a la que tenemos aquí ahora y lo que llevamos son piezas que relatan la historia de Alicante y a través de ellas podríamos decir que hace referencia a la historia de España», apunta Manuel Olcina, director del museo.

Un recorrido desde la Prehistoria hasta el siglo XIX, con objetos de cerámica, metal, piedra y hueso, originales de los fondos del centro, a excepción de cuatro que son réplicas: la mano de bronce de Lucentum, pieza que es única; la Dama de Elche; la lápida conmemorativa de la fundación de una mezquita de la Rábita de Guardamar y la lámina de plomo de la Serreta con escritura grecoibérica.

«También hay piezas inéditas que se encuentran en el almacén visitable del museo porque la exposición permanente la montamos en el año 2000 con el material que teníamos, pero han ido apareciendo muchas más cosas». Entre los objetos que se exhibirán por primera vez, se encuentra una gran tinaja ibérica con un jinete pintado o una pequeña figurita romana. «Es una exposición muy equilibrada», destaca el arqueólogo.

Como un «momento histórico» definió el director de exposiciones del MARQ, Jorge Soler, esta muestra que tiene el comisariado colectivo de los arqueólogos del museo. «Es la primera vez que mandamos una colección fuera y además no ha sido fácil», afirma. Una muestra que ocupará 600 metros cuadrados, en dos salas, que se completa con un catálogo «espléndido», apunta Soler, con 20 artículos «en los que se hace un repaso de las piezas y supone un esfuerzo para poner al día el desarrollo histórico cultural de nuestra provincia».

También se exhibirá la muestra comisariada por el profesor José Cutillas que se realizó para completar la exposición de Irán en el MARQ, que incluye documentos facsímiles del Archivo General de Simancas.

Igualmente se organizará un ciclo de conferencias, previsiblemente para el mes de diciembre.

El director de la Fundación MARQ, José Alberto Cortés, destaca el papel fundamental de las embajadas en un momento en el que la situación de embargo internacional «incide en la normalidad de los acuerdos». Y apunta que «la cultura es un puente entre los pueblos y un punto de encuentro entre personas que tenemos los mismos objetivos».

Cortés recordó que el Museo Nacional de Irán ya había estado en España en 2003, pero con una muestra centrada en el mundo persa, mientras que la exposición que se puede ver en el MARQ, «ofrece un recorrido desde la primera ocupación humana hasta la islamización».

Con motivo de la clausura de estas muestra, que han visto más de 94.000 personas, el museo alicantino celebrará unas jornadas de puertas abiertas el sábado y el domingo.