Esta es una historia cuanto menos curiosa: Magne Osnes Haugen es un actor escandinavo afincado en Ciudad Quesada, Rojales, con aspecto vigoroso, barba tupida y espesa, anaranjada, con una reciente filmografía de vikingo (así lo indica su IMDb) que encaja a la perfección con su fisonomía.
El caso es que Osnes Haugen averiguó por una conversación que su amigo y compañero Normann Borjvand, director especializado en el cine de aventuras y acción, requería para su nuevo proyecto de localizaciones de mar y montaña a pocos kilómetros de distancia y con la máxima luz natural posible. Así pues, ante estas circunstancias, surgió la consiguiente invitación: ¿Y por qué no trasladar el equipo de producción de Suecia a la Costa Blanca?
Este es el punto de partida de State of Prey, un thriller policíaco que involucra a un agente del MI6 enviado a la costa alicantina para investigar a la mafia y el tráfico de órganos. Un trabajo audiovisual que, durante semanas, se ha llevado a cabo en distintos puntos como Benidorm, Alicante, Torrevieja, Elche, Santa Pola, Callosa de Segura o Campomar (Guardamar del Segura) y en el que, además, se ha contado con actores alicantinos como Fele Pastor, Alfredo Belda o Marc Almodóvar.
Con dirección de Normann Borjvand, y un reparto que integran David Baleiro, Magne Osnes, Love Jarl, Oyvind Snyen y Yvonne Haughton, entre otros, el filme se ha rodado en inglés, español, noruego, sueco y chino. El estreno, en principio, está fijado para principios del 2020 con una grabación que combina paisaje e interiores de Suecia y España.
«Lo cierto es que se ha puesto mucha confianza en nosotros desde el principio, y por lo que pude hablar con el director, quedó encantado. Sobre todo por la combinación de los montes de la Vega Baja con la playa y el mar tan cerca, a tan pocos kilómetros. Y el sol, la luz... alucinaba el poder trabajar tantas horas con luz natural», indica el alicantino Alfredo Belda, quien encarna al antagonista de esta historia.
«Fueron días de rodaje muy duros, muy intensos, pero con una gran profesionalidad. Normann Borjvand es muy exigente, y nos hacía repetir varias secuencias puesto que quería contar con el máximo material», agrega.
Desde la productora de State of Prey destacaron la variedad de ambientes y localizaciones para adaptar los planes de rodaje a lo deseado y buscado por parte de la dirección. «La mayor parte de la película se rodó en la Costa Blanca que nos agradó por ser increíblemente bonita y llena de diversidad. El director está especialmente impresionado con los montes en la región que poseen una calidad de textura única que se reflejan de una manera increíble en la película. Hubo una secuencia de acción que inicialmente se escribió como una persecución en coche pero que fue reescrita como una persecución a pie llena de adrenalina y una secuencia de acción en la cima del monte de Callosa de Segura», apuntaron fuentes de la productora.
El realizador Normann Borjvand desea que el estreno del filme State of Prey tenga lugar también en Alicante.
