Y cuando crees que no hay vida más allá de la Tierra, del universo, de Juego de Tronos, Poniente y del helado de chocolate con cacahuete, llega un amiga, con sorna, y me dice: «Confiesa, ¿hay vida más allá de los rotarios?». Y a mí me dan ganas de coger la servilleta y taparme como Cole, el niño de El Sexto Sentido, y con voz temblorosa contestarle: «En ocasiones veo? rotarios. Muchos». Últimamente, me pasa. Están en todas partes, como los algoritmos. Empiezo a pensar que son omnipresentes. Pero no, en la ciudad hay cinco clubes (en la provincia, muchos más). Además, no solo están, se involucran porque ya se sabe que ser rotario implica compromiso, atrás postureo y florituras. Y julio es su mes porque su año fiscal y administrativo comienza el día 1. Así que la rueda, símbolo rotario, no deja de rodar.
Pues eso, un martes cualquiera, el RC Alicante Lucentum reunió a más de 250 personas. No todos rotarios, también empresarios, colaboradores habituales, algún político, representantes culturales y sociales? Lo que viene a ser una nutrida representación de la sociedad alicantina. «¡Parece una boda! Vaya poder de convocatoria», decía una señora a otra mientras posaba en el photocall y oteaba el jardín de Torre de Rejas.
Normalmente, el cambio de collares, una de las ceremonias más protocolarias, se realiza por la noche y como dictan las invitaciones con aspiraciones, en inglés, con dress code (etiqueta). En esta ocasión, las presidentas, la saliente Begoña Méndez y la entrante, Lola Peña, lo tuvieron claro: «¡Mejor a mediodía!». Tras el toque de campana del macero, Pablo Rico, y el saluda rotario se entregaron las menciones honoríficas Paul Harris, máxima distinción rotaria, a Pedro Romero, Rafael Jorro y Javier Jiménez. Y se colocaron insignias a los nuevos seis socios. Luego, despedida de Begoña Méndez y su nombramiento como presidenta honorífica fundadora. Además, seguirá activa como miembro de la nueva junta directiva.
El momento más esperado llegó con el cambio de collar rotario. Lola Peña rompió minutos antes el discurso que tenía preparado y se dejó llevar por la emoción donde homenajeó a todas las personas que la han apoyado, especialmente, amigos y familia. «Hoy estoy sentimental, es así. Los que me conocéis sabéis mi intención, vaya donde vaya y haga la tarea que haga siempre dejo el listón un poco más alto que me lo encontré», comentó Lola, que asume con ilusión y muchos proyectos la presidencia del club.
Entre los asistentes, el alcalde Luis Barcala; los ediles Lidia López y Antonio Peral; los empresarios Rafael Galea, Ramón Rives, Clara Paredes y Francisco Domene; el cónsul Bljorn Sandstrom; representantes del resto de clubes rotarios de Alicante, Elche, San Vicente, Dénia, Orihuela y Alfàs del Pi; el comandante Agustín Miralles; Janine Contreras; Carmen Robles, de la Fundación Manuel Peláez; Chay Gómez; Joaquín Santo Matas; del Teatro Principal, Mª Dolores Padilla; Pepe Llorca, de INFORMACIÓN TV; representantes de ongs y asociaciones como Alinur, Apsa, Aodi, Down Alicante, Aldeas Infantiles, Nuevo Futuro, Amurada? Y muchos más.
