«Si tú vienes a cantar 'trap' o a bailar danza contemporánea, nosotros no vamos a pedirte una maqueta previa o a que nos digas cuántos seguidores tienes en las redes sociales. Nosotros no somos nadie para decir si lo que haces es bueno o malo? y si tú necesitas bailar, sube al escenario y baila. Luego tu trabajo y el público definirá dónde puedes o dónde vas a llegar. Pero nosotros no cribamos o seleccionamos. Nosotros no somos las personas indicadas para ello».
Alacant Desperta concluyó ayer con cifras récord en el Monte Tossal con la participación de 250 artistas y la estimación, según fuentes de la organización, de 8.000 a 10.000 personas de público. Una amplia asistencia en el festival multicultural cuyo objetivo pasa por ser la mayor plataforma de exhibición alicantina sin etiquetas ni distinciones culturales.
«Lo que hacemos es cubrir la necesidad vital de la gente de expresarse, de tener una mirada amiga en frente, y si eso lo quieres llamar cultura o arte, a nosotros nos da igual. Nosotros creemos que hay gente que necesita hacerlo, que no tiene otro sitio donde hacerlo y se merece tenerlo».
Paco Lloret, del colectivo Alacant Desperta, asegura que esta IV edición ha aumentado pero también ha consolidado asistentes a partir de un tejido organizativo que, recuerda, no tiene ánimo de lucro, es decir, no se lleva ni un centavo del trabajo invertido. «Creemos que de los 361 días al año, está claro que hay que trabajar y ganar dinero, que hay que vivir, pero se puede trabajar por algo que no sea dinero tres días al año», indica.
«Alacant Desperta cubre el hueco que hay entre estar en tu casa recitando ante un espejo o subirte por primera vez a un escenario. Es la expresión como necesidad vital. Es ahí donde llega Alacant Desperta. Somos cantera de público, artistas y ciudadanos», agrega.
El Ayuntamiento de Alicante aporta la infraestructura (luz, agua, ambulancia y espacio) pero, como recalca el colectivo, «ellos nos ayudan con las cosas materiales pero el trabajo es enteramente ciudadano. Toda la decoración, todos los colectivos se han movido aquí... y eso es ciudadanía pura. No hay ningún tipo de empresa privada detrás», matizan.
El programa está integrado por numerosas actuaciones con arte, canción, poesía, danza e incluso deportes a pie de pista con todo tipo de exhibiciones. Variedad que se reproduce en la diversidad de públicos, de más pequeños a más mayores, con una oferta difícil de superar.
«La presencia de público va por horarios y zonas. Pero, por ejemplo, ha funcionado muy bien el break dance, donde se juntaron niños desde los ocho o diez años, hasta gente mucho mayor que bailaba por otro lado en la pista de baloncesto con buena energía. Me pareció un ejemplo de comunión y hermandad, con actividades también de deportes adaptados y diversas capacidades con los que estamos haciendo un gran esfuerzo para sumar a todos los colectivos posibles como ciudadanos iguales. Todo ello nos enorgullece», asegura Lloret.
Los horarios de estos tres últimos días han sido intensivos. Toda la tarde-noche del viernes, sumado al sábado y domingo, con programación todo el tiempo hasta las tres de la madrugada en algunos casos, con lo que han tratado de ser muy cuidadosos por las quejas originadas en otras ediciones.
«Se ha cambiado la orientación del escenario de rock por las quejas de una asociación con la que nos reunimos para mitigar y atenuar el sonido del escenario que molestaba a este barrio. Está claro que hay música, que es vida, que este es un festival que está vivo, y es normal que se tenga que sentir así Alacant Desperta. Sabemos que hay algunas quejas, que las seguirá habiendo, porque no se puede agradar a todo el mundo, pero son las menos. Desde el colectivo, la mayor parte de la ciudadanía está a favor, está contenta, y ese sentimiento es el apoyo de Alicante», comenta la organización.
