En un marco idílico como el Teatro Principal de Alicante, en la simbólica caja de sueños ubicada en el corazón de la ciudad, tuvo lugar ayer el arranque del Festival de Cine de Alicante. Escenario idóneo, sin duda, para rendir homenaje a los tres premiados en la XVI edición del certamen cinematográfico alicantino con las actrices Juana Acosta y Ana Wagener junto al cineasta Jaime Chávarri.
Juana Acosta, uno de los rostros más célebres de la pequeña y gran pantalla, recogió el galardón «Ciudad de Alicante» de manos de la también intérprete Malena Alterio, señalando que «es un honor y un inmensa alegría» este premio en Alicante, ciudad que le trae muy buenos recuerdos «puesto que aquí rodamos gran parte de la serie Crematorio que marcó un antes y un después en mi carrera». Por eso mismo, agregó Acosta, «Alicante está en un rincón especial de mi corazón».
Juana Acosta resaltó además la ilusión de poder recibir el premio de manos de Malena Alterio. «Es mi cuñada amada y, pese a que las circunstancias han cambiado, será de mi familia siempre», agregó en alusión a Ernesto Alterio, expareja de Juana Acosta y padre de su hija Lola.
El premio «Ciudad de Alicante» distingue a jóvenes promesas del cine español que destacan por su trayectoria y su proyección en el panorama cinematográfico nacional. Entre los últimos trabajos de Juana Acosta está la exitosa Gigantes, de Enrique Urbizu, o Perfectos desconocidos, de Álex de la Iglesia.
Jaime Chávarri obtuvo el Premio Lucentum con el que se reconoció su amplia trayectoria profesional. El cineasta de E l desencanto recibió el galardón de Amparo Climent asegurando entre un fuerte aplauso de los asistentes que «es agradable siempre que se acuerden de uno, eso calienta el corazón».
Por su parte, Ana Wagener, Goya del 2018 con GoyaEl Reino, salió al escenario para alzarse con el Premio de Honor del Festival de Cine de Alicante junto al director Oriol Paulo.
La gala, conducida por Antonia San Juan, acarició el lleno de público en el interior del Teatro Principal pese a que en las inmediaciones del emblemático edificio alicantino apenas se suscitó ambiente de cine (de hecho, el ruido de Castaños con el «tardeo» era mucho mayor).
Es más, la presentación prometía en el arranque con un notable monólogo de Antonia San Juan, y la velada musical con películas inolvidables como La lista de Schindler. Pero la proyección masiva de vídeos, la falta de originalidad en el guión y las largas intervenciones, citas y menciones precipitaron la gala a un peligroso tedio.
En cualquier caso, lo mejor se concentra en la programación cultural que ofrece el XVI Festival de Cine de Alicante, ciudad de séptimo arte durante toda una semana con 1.200 cortometrajes y otras tantas películas de más de 18 países en sus más variadas secciones y competiciones oficiales (con Cine Mediterráneo, de calle, social, LGTBI...).
«Una ciudad sin cultura es una ciudad ignorante», aseguró Vicente Seva, director del certamen.
Entre los asistentes ayer, el diputado de Cultura, César Augusto Asencio; el alcalde de Alicante, Luis Barcala; la concejala de Cultura, María Dolores Padilla; el director Rodrigo Sorogoyen; los actores Alejandro Tous y Javier Pereira; los críticos Luis López Belda y Gonzalo Eulogio; el guionista Maxi Velloso; el dramaturgo Juan Luis Mira; el profesor John Sanderson; la actriz Yolanda Berenguer o el empresario Jesús Navarro junto a Oksana Peresadko, entre otros.
