"Es solo una pajita, dijeron ocho billones de personas". Es la frase que encabeza el blog del fotógrafo canadiense Benjamin Von Wong, cuya última instalación artística, 'Strawpocalypse' (algo así como 'Pajitapocalipsis'), crea conciencia sobre lo contaminante e innecesario que es el uso de las pajitas de plástico. Un mal hábito del que debemos deshacernos, especialmente en España, ya que según Greenpeace somos el país en el que más pajitas de plástico se utilizan por habitante y año de Europa (más de 13 millones por día).

168.000 son las pajitas usadas que conforman esta impresionante estructura de 3.3 metros llamada 'La partición marítima', ensamblada por cientos de voluntarios con la colaboración de Zero Waste Saigon y Starbucks Vietnam. Las olas de plástico, en distintos tonos de azul, se separan para dejar a la vista una marea amarilla que representa los residuos de plástico depositado en el fondo del mar. El sol, una bombilla, brilla e ilumina el océano ficticio. Bolsas de plástico, también recicladas, sirven de soporte para las pajitas y para los tubos LED.

"Para mi último proyecto quería animar a la gente a rechazar la próxima pajita", dice en su web Von Wong. Las negativas urgen, porque cada 60 segundos se vierte al mar el plástico que cabría en el depósito de un camión. Si este ritmo de consumo masivo de pajitas continúa, para 2050 habrá más plástico que peces en el mar. Pero no está todo perdido: este desastre puede evitarse o atenuarse a base de pequeños gestos individuales, como rechazar las pajitas en los restaurantes o usar otras comestibles o reutilizables, como las de acero, vidrio o bambú.

'Strawpocalypse' estará expuesta en Estella Place, Ho Chi Minh, Vietnam, hasta el 24 de marzo de 2019. En su web, Von Wong dice que busca una residencia permanente para la instalación.