? El objetivo es conservar el patrimonio musical y que no se pierdan partituras antiguas. Para ello María Alfaro ha unido sus «dos pasiones, mi carrera y la música». Mediante los algoritmos que ha desarrollado que combinan miles de compases y acordes ha generado un corpus con nada menos que 100.000 partituras que servirán al ordenador a aprender a leer la música y ser capaz de sacar el texto de las partituras que se le introduzcan. «Así la máquina podrá sacar por un lado la partitura en lenguaje musical y por otro en lenguaje de texto de cualquier partitura», señala María. «El reconocimiento óptico de música está avanzado pero le faltaban ejemplos y en eso es en lo que me he centrado yo, en proporcionárselos», resume.