La mayoría de las obras que se exponen desde ayer en la Lonja de Alicante son cosas que se pueden ver por la calle, advirtieron ayer los comisarios de 365 ALC Arte Urbano 365 ALC Arte Urbano-la última muestra del proyecto Todo lo que ves es arte del Consorcio de Museos de la Comunidad Valenciana- y efectivamente en la sala se pueden contemplar muchos cuerpos tatuados con los que nos cruzamos a diario, imágenes de skaters, murales y grafitis como los que pueblan las ciudades o fotografías de festivales de música a los que los jóvenes acuden cada verano.

Pintura, fotografía, grafiti, escultura y arte mural de once artistas -Pablo Bueno, Víctor Cámara, Iván Carbonell, David J. García, Salvador Gómez, Kaufman, Loles & Puig, Sento M.M., J.J. Román, Antonio Samo- más un grupo invitado, conforman la exposición que cierra el ciclo comisariado durante un año en la sala C de la Lonja por Pilar Tébar y José Luis Martínez Messeguer, tras las anteriores realizadas de videoarte, retrato y paisaje.

«Es la apuesta más transgresora, la más arriesgada y la de resultado más vistoso», apuntó la comisaria Tébar tras indicar que «hemos traído aquí el arte del mañana» y lamentar que «faltan muchos más nombres, pero los que están tenían que estar»

«Queríamos dignificar el trabajo callejero y meterlo en el museo», destacó Messeguer, ya que para muchos de los artistas seleccionados esta es la primera vez que muestran sus obras en una sala exposiciones, aunque probablemente a la mayoría no le quite el sueño esta circunstancia, ya que su hábitat natural es la calle.

La muestra reúne la obra de once artistas, todos ellos alicantinos salvo el valenciano Antonio Samo, que presenta dos esculturas de las tribus urbanas sobre las que trabaja, además del grupo formado por el fotógrafo Valiente Verde y los tatuadores Lauder López y Carlos Navas (de Soul Pecker's Tatto & Gallery), que han dado «rienda suelta» a sus deseos tatuando de forma figurativa, tribal y geométrica las fotografías de cuerpos desnudos de Verde.

Messeguer explicó que el tatuaje es el coleccionismo del siglo XXI, «es habitual en menores de 40 años, que no van a comprar obras de arte porque ya las llevan en la piel» y querían con ello «sacarlo un poco de la sombra».

La cultura alrededor del tatuaje también se refleja en Ivan Carbonell, David J. García y J.J. Román , tres fotógrafos actuales que retratan «a personas de su entorno, desnudos, tatuados y en blanco y negro», añadió Messeguer, quien avanzó que solo en la ciudad hay 52 estudios de tatuaje.

Otros tres artistas han intervenido directamente en las paredes de la sala con murales y grafitis realizados in situ: Pablo Bueno, Salvador Gómez (DCT46) y Kaufman. Los dos primeros se pasaron tres días realizando sus obras, algunas de más de 7 metros de largo. Gómez tiene por la ciudad muchas de sus pinturas Dreams Come True y los combina con retratos realizados con plantillas, mientras Kaufman, que sin pedir permiso ha dejado huella por toda la provincia con sus dibujos geométricos -«los esprais eran buenos», bromea- también usa maderas o lienzos para sus obras.

La realidad del deporte urbano llega con Sento M. M. que maneja la velocidad en la fotografía de skaters y gente practicando bmx, slackline, parkour, patinaje agresivo o longboard en Alicante. También la cultura skate tiene su hueco en las obras de Víctor Cámara, tanto en sus pinturas pop con materiales encontrados como en los carteles pegados por la calle que tunea a su antojo mientras Loles & Puig muestran una pequeña parte de su archivo de conciertos musicales .

57 artistas han pasado por este proyecto, dotado con 40.000 euros por parte del Consorcio, y que este año deberá cambiar de sala -MACA o Cigarreras, señaló la concejal de Cultura-, ya que el la muestra del Titánic ocupara todo el recinto de mayo a noviembre.